Las estaciones de servicios de las firmas Shell y Esso de Corrientes y Chaco aplicaron nuevos ajustes en los valores de sus combustibles durante los últimos días, por lo cual las naftas premium superaron la barrera de los 10 pesos. En tanto, los productos de YPF también registraron importantes incrementos durante la semana pasada que ubicó el precio de la súper en 8,99.

Las subas en los combustibles comenzaron a aplicarse durante el último fin de semana y en el caso de Shell se registró un incremento de 50 centavos en el litro de la nafta premium, cuyo valor trepó los 10,49 pesos. Igual incremento se aplicó a las naftas premium de Esso, que en las últimas horas pasó de los 9,99 a los 10,49 pesos, mientras el litro de la súper subió 20 centavos para situarse en la barrera de los 9,99 pesos. También las naftas premium de la firma OIL quedaron a un paso de superar el límite del congelamiento de precios, ya que la premium estaba ayer en los 9,99 pesos, mientras la súper subió 30 centavos y quedó en la línea de los 9,89 pesos.

La empresa OIL había sido la primera en superar los topes de congelamiento durante agosto pasado, cuando el litro de la nafta premium escaló hasta los 10,49 pesos en esta provincia, aunque luego la empresa decidió retrotraer los valores debajo de los 10 pesos.

Estos ajustes de precios se sumaron a los incrementos de entre 10 y 50 centavos que habían aplicado durante la semana pasada las estaciones de servicio de YPF, cuya nafta súper se ubicó en la línea de los 8,99 y la premium en los 9,74 pesos. Esta barrera también fue quebrada por la Shell en capital chaqueña, ya que la nafta premium de esta empresa ascendió durante las últimas horas hasta los 10,20 pesos, mientras la súper trepó a los 9,74. Las estaciones de Esso de Resistencia, en tanto, mantenían las nafas súper y premium en los 9,75 y 9,39 pesos respectivamente, mientras en los surtidores de YPF el litro de estos combustibles continúan fijado en 8,99 y 9,74 pesos. La Asociación de Remiseros de Corrientes advirtió que estos incrementos en los precios de los combustibles podrían traducirse en un nuevo incremento de sus tarifas.