El expresidente y Nobel de la Paz Simón Peres falleció ayer a los 93 años dos semanas después de sufrir un accidente cerebrovascular y su muerte ha sumido a Israel en un estado de duelo nacional por quien era considerado el último de sus ‘padres fundadores‘.

Peres, que estuvo al frente de la política nacional israelí durante cinco décadas, en la que se inició con 18 años, sucumbió de madrugada a un letal derrame cerebral que sufrió el pasado 13 de septiembre. ‘Hoy, con gran tristeza, debemos despedirnos de nuestro querido padre, el noveno presidente de Israel, Simón Peres‘, fue el escueto anuncio oficial de la familia que a las 7:00 de la mañana hora local confirmaba las informaciones que ya circulaban por los pasillos del hospital desde dos horas antes.

Sereno y breve, Jemi Peres, hijo del expresidente, describió a su padre como ‘uno de los padres fundadores del Estado de Israel‘, declarado en 1948 por David Ben Gurión, de quien el dirigente fallecido fue su mano derecha.

En Israel Peres será recordado por su contribución a la seguridad del país a través de proyectos como el reactor nuclear de Dimona, la supremacía de su Fuerza Aérea, entre decenas de proyectos, así como por no haber podido ganar con claridad unas elecciones.

Simón Peres, el expresidente y ex primer ministro de Israel, fue un actor excluyente de la vida política de Israel desde su fundación. Nacido en Wiszniewo, Polonia, el 2 de agosto de 1923, Peres era el último sobreviviente de la generación de políticos que crearon Israel en 1948.

El exlíder laborista fue elegido por primera vez en el Parlamento israelí (la Knesset), en 1959 y fue uno de sus miembros durante 48 años, la carrera parlamentaria más extensa en la historia de un Parlamento. Fue ministro en 12 gobiernos, asumió en dos ocasiones las funciones de primer ministro, y las de presidente del Estado entre el 2007 y 2014. .Como director general del Ministerio de Defensa, estuvo involucrado en la planificación inicial de la guerra de Suez en 1956.