El juez federal Claudio Bonadio murió este martes a las 6:20, en su casa de Belgrano, según confirmaron desde su entorno. El magistrado había cumplido 64 años hace tres días, el 1° de febrero.
Bonadio se encontraba de licencia. El año pasado, el juez se sometió a una intervención en la cabeza. Cuando se reintegró al juzgado a mediados de mayo, les dijo a sus colaboradores: “Los registros sobre mi muerte están exagerados”.
Los rumores sobre su salud empezaron a circular en los pasillos de Comodoro Py en mayo del año pasado, cuando se sometió a una intervención en la cabeza. Al retomar sus funciones, les dijo a sus colaboradores: “Los registros sobre mi muerte están exagerados”.
Durante el 2019, continuó con su tarea habitual como juez de la Nación. Avanzó, por ejemplo, en una serie de procesamientos para Cristina Kirchner, Julio De Vido y otros ex funcionarios, junto a empresarios. Además, elevó a juicio oral la parte principal de la causa de los Cuadernos y todos los expedientes derivados.
En la última década, Bonadio se convirtió en uno de los magistrados más activos en investigar las causas de corrupción del kirchnerismo, lo que le provocó un fuerte enfrentamiento con la ex presidente Cristina Kirchner y otros funcionarios que participaron de los gobiernos peronistas.
En 2015, cuando aún era mandataria, la actual vicepresidenta habló de él en cadena nacional como un “juez pistolero y extorsionador”. Fue luego de que el entonces funcionario judicial ordenara allanamientos en la inmobiliaria de Máximo Kirchner en Santa Cruz.
En su rol como juez federal, instruyó causas de determinante resonancia política como la de los Cuadernos de la Corrupción, la denuncia de Nisman por el Memorádum con Irán, Dólar Futuro, la primera parte del encubrimiento del ataque a la AMIA y la Tragedia de Once. Además, pidió desaforar y detener a Cristina Kirchner y ordenó encarcelar a los ex jefes montoneros Fernando Vaca Narvaja y Roberto Perdía.
Nació en 1956 y transitó su infancia en San Martín. Se recibió como abogado en la Universidad de Buenos Aires (UBA). Peronista, militante en Guardia de Hierro, llegó a la Justicia federal en 1994 por designación del entonces presidente Carlos Saúl Menem.
Padre de un hijo, abuelo de un nieto, hincha de Boca no muy interesado por el fútbol, forjó un estilo propio en Comodoro Py 2002. En 1996, fue acusado por Domingo Cavallo de “jugar a favor del gobierno” en virtud de la famosa servilleta que habría escrito Carlos Corach con los nombres de los jueces afines al menemismo.
Su participación en la Tragedia de Once lo acercó a Jorge Bergoglio, quien mostró especial interés por los familiares de las víctimas antes de asumir como Papa. Producto de la estrecha relación que entablaron, en 2014 visitó a Francisco en el Vaticano.
Su muerte generó un fuerte impacto en los ámbitos judicial y político. Patricia Bullrich, en su rol de autoridad partidaria del PRO, aseguró: “Esperamos que las causas que llevaba adelante sigan al ritmo que los judiciables precisan para que la Justicia llegue a tiempo y sea verdaderamente justa”.
“Quienes integramos Juntos por el Cambio, creemos que una justicia autónoma del poder e independiente brinda el equilibrio que todo sistema republicano precisa. Le enviamos nuestro sentido pésame a la familia del Juez Claudio Bonadio”, agregó.
El senador radical Julio Cobos le envió sus condolencias a la familia y la diputada nacional Graciela Ocaña habló de una enorme pérdida para la Justicia.