La política de endurecimiento del gobierno en las fronteras y en contra de los extranjeros que cometen delitos se hizo sentir en los últimos tiempos: desde enero pasado hasta hoy, la Dirección de Migraciones detuvo a 252 extranjeros que tenían alertas rojas de Interpol, expulsó a 14 inmigrantes con antecedentes penales de "alta peligrosidad" y aumentó en un 62% los operativos de control respecto del último año de la gestión kirchnerista.
Según se desprende de un detallado informe de la Dirección de Migraciones, ese organismo a cargo de Horacio García y dependiente del Ministerio del Interior impuso un fuerte empeño en el control de las fronteras y de los delitos de extranjeros mediante diferentes mecanismos de seguridad. Todas estas medidas se potenciaron con el decreto que emitió el gobierno en enero para aumentar el control de los extranjeros que delinquen y contempla un sistema de deportaciones automáticas.
Por medio del nuevo sistema de alerta en red que se instaló en las 156 oficinas de los pasos fronterizos migratorios de todo el país, con una conexión inmediata de la base de datos de Interpol en la sede central de Lyon, el gobierno logró impedir el ingreso a la Argentina de 252 extranjeros que estaban en las listas de "alerta roja" de ese organismo internacional. Según el informe de Migraciones en ninguno de estos casos hubo pedidos de captura por casos de terrorismo. Pero entre las personas detenidas que intentaban ingresar al país había narcotraficantes, acusados de abuso sexual, condenados por estafa, por homicidio y extranjeros acusados de delitos de lesa humanidad.
Entre los 252 detenidos y regresados a sus países de origen se encontraban personas de nacionalidad peruana, boliviana, chilena, uruguaya, mexicanos, paraguayos, brasileros y también ciudadanos de la Unión Europea como franceses, italianos, y españoles, entre otros.
La mayor parte de estos extranjeros impedidos de ingresar al país por las alertas roja de Interpol fueron encontrados en los pasos fronterizos de Posadas, Iguazú y también en el aeropuerto internacional de Ezeiza.
"El nuevo sistema de conexión instantánea con la base de datos de Interpol de Lyon en todos los puestos fronterizos del país permitió agudizar los controles e impedir que ingresen delincuentes que antes podían pasar sin problemas", dijo un destacado funcionario del gobierno que siguió de cerca el informe de Migraciones.
Por otra parte, desde que en enero pasado se impuso el polémico decreto que fijó mayores controles migratorios en la Argentina se expulsaron a 14 inmigrantes con antecedentes penales de "alta peligrosidad" y condenas en la justicia. Algunos de estos fueron detenidos y expulsados cuando se acercaron a Migraciones para renovar sus documentos de residencia y otros se detuvieron mediante operativos realizados desde el Ministerio del Interior. Esta medida fue acompañada por una modernización de la base de datos de Migraciones, por la incorporación de los datos de reincidencias en las ventanillas de migraciones, la instalación de la red de Interpol y el sistema de información anticipado de pasajeros para las compañías aéreas.
Según se desprende de la Dirección de Migraciones los operativos de control de inmigrantes ilegales aumentaron en un 62% en 2016 respecto de 2015. A la vez, se espera que en los próximos meses se profundicen estos controles mediante la implementación de un moderno dispositivo de control digital móvil. Este mecanismo que se instalará para todos los inspectores de Migraciones constará de una suerte de tablet para que los detenidos en un operativo pongan su huella dactilar y de inmediato se baje la información de las bases de datos de Migraciones.
Por otra parte, desde que se impulsó el decreto con nuevas medidas migratorias el gobierno remarcó que hubo 48.000 radicaciones nuevas de inmigrantes en el país. Así, el informe de Migraciones revela también que se aumentaron desde enero pasado en un 80% los turnos de inmigrantes para regularizar su situación. A la vez, desde diciembre de 2015 que asumió Macri la Dirección de Migraciones registró 250.000 radicaciones de extranjeros. Esto es un promedio de 6000 inmigrantes por mes. Se trata de un número significativamente más elevado que los países de la región donde, por ejemplo en el caso de Uruguay, se radican unos 3000 extranjeros al año.
Entre las 48.000 radicaciones registradas en lo que va del año se encuentran mayoría de ciudadanos de Paraguay, Bolivia, Perú, Chile y Colombia. También hubo un incremento de solicitudes de visado de turismo de chinos. De las 9500 solicitudes se aprobaron 8180 visas para ciudadanos chinos.
El informe de Migraciones revela datos comparativos con la gestión de Cristina Kirchner. Así, mientras que en 10 años el kirchnerismo realizó 240.000 radicaciones, sólo en 2016 se registraron 215.000 radicaciones y para este año se proyectan entregar 270.000.
Ayer hubo un encuentro del Ministerio del Interior, Seguridad y Justicia con unos 50 fiscales y jueces de todo el país para poner en marcha los mecanismos necesarios tendientes a dar sustento práctico al decreto de migraciones. Desde la Dirección de Migraciones se planteó la necesidad de que los jueces aporten datos y ayuden a dar a conocer la lista de extranjeros que tienen condenas en La Argentina para su expulsión. Todos los actores presentes quedaron en continuar las reuniones para hacer seguimiento al decreto.
Fuente: Infobae