Autoridades de la ciudad de Malargüe, al Sur de Mendoza, declararon ayer el alerta amarillo tras una nueva erupción del volcán Peteroa, que comenzó a despedir una fina capa de cenizas y un intenso olor a azufre que ya perciben unos 300 pobladores de campos aledaños.
"Detectamos que aumentó la actividad normal del Volcán Peteroa, o sea que éste ya no despide sólo gases sino cenizas y un intenso olor a azufre que se percibe en los alrededores donde viven más de 300 puesteros dedicados a la cría de caprinos, ovinos y vacunos", informó la geógrafa del Centro Internacional de Ciencias de la Tierra (ICES), Amalia Ramíres, que junto con Defensa Civil y la Municipalidad de Malargüe dispusieron el alerta.
La científica, especialista también en Ordenamiento Territorial, aclaró que "no hay cenizas en la ciudad de Malargüe ni en las localidades rurales, sino que en determinados momentos del día y no de manera constante, se observa una especie de bruma". Si bien no hay que evacuar la zona, si "hay un alerta amarillo lo que significa no sólo estar alertas sino atentos y tomar precauciones como guardar agua, barbijos, antiparras, anteojos y estar en contacto permanente con la gente del lugar y seguir monitorenado el área".
Ramíres y Darío Trombotto, responsable del Grupo de Monitoreo del Complejo Planchón-Peteroa, sobrevolaron el volcán ubicado hacia el Oeste de la ciudad de Malargüe, al Sur de Mendoza, donde pudieron observar una nube volcánica con rumbo sur-sureste que se percibe a los 55 kilómetros por tierra. Asimismo, los monitoreos diarios que realizan desde el ICES por imagen satelital confirmaron la misma dirección y área. Según los cálculos de los especialistas, entre las localidades de Bardas Blancas hacia el oeste al volcán y en todos los valles aledaños, "depende la intensidad y dirección del viento, ya perciben el olor a azufre y una caída muy suave de cenizas", dijo la geógrafa. El Peteroa es el único volcán con actividad en Mendoza y constituye un cono piramidal argentino chileno, conocido como Volcán Azufre. Según los registros, en 1991 fue la última erupción grande del Peteroa y hay un registro de 1998 no significativo hasta esta última erupción detectada el 4 de septiembre. Mientras tanto, personal de Defensa Civil ya entregó folletería a los pobladores y tomaron muestras de agua.
El informe oficial proporcionado por el ICES indica "un importante límite de cenizas, una importancia a la altura de Valle Hermoso". "Se divisó una pluma que se origina desde un sombrero de unos 150 metros de altura hacia el valle Alto y Medio del Río Grande, que llega a la localidad de Bardas Blancas y alrededores, distante en línea recta a más de 60 kilómetros del volcán, hasta la altura del paraje El Carrizalito", dice el escrito oficial. Además señala "una pluma oscura en su comienzo y discontinua en su densidad en diferentes sectores del valle del Río Grande, lo que no significa que sea menos densa en el valle medio". "El sombrero está indicando un contenido importante de eyectos cenizas que le da la típica coloración oscura, acompañada por gases con azufre percibidos durante el vuelo".

