Hoy comenzaron a trabajar nuevamente los natatorios en el marco de autorizaciones paulatinas para que se reanuden las actividades deportivas. Este es el panorama que presenta Mendoza mientras que en San Juan aún es una actividad que está prohibida.
Esto exige la adaptación de estos espacios a las medidas preventivas para atenuar la transmisión del virus Sars CoV-2, por ello, irán abriendo en la medida que lo logren.
El asunto es qué se sabe de sobre la transmisión del coronavirus en estos entornos. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España ha emitido un informe al respecto y fue difundido por el sitio BBC Mundo.
Allí destaca fundamentalmente que el cloro que se usa como desinfectante en las piscinas facilita la muerte del coronavirus. Su uso es obligatorio en las proporciones que se consideran adecuadas para no afectar la salud y se destaca que lo fundamental es verificar constantemente que esta concentración sea la requerida.
De todas formas, Joan Grimalt, investigador del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua de España dijo a ese sitio que hay mucha incertidumbre sobre el tema. Es así en casi todo lo asociado al virus dado que es muy nuevo y está en estudio.
“Una contaminación dentro del agua es improbable, pero es mucho más improbable en agua salada o en agua de piscina”, subrayó.
También refiere que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) coinciden en que "el funcionamiento y mantenimiento adecuados (incluida la desinfección con cloro o bromo) de piscinas, jacuzzis, spas o áreas de juego con agua deberían inactivar el virus".
Como medida para atenuar la circulación el CSIC recomienda el lavado manos y cara antes de ingresar y mantener la distancia de al menos un metro y medio.
En Mendoza se autoriza la asistencia según el número de DNI que corresponde para las salidas. Habrá que pedir turnos para controlar la asistencia y no podrán usarse los vestuarios y duchas.
Fuente: Los Andes.