“Estamos tratando de construir los consensos necesarios. No quiero hacer especulaciones sobre sectores. Hay muchos actores que están viendo de acompañar esta reforma. Consideramos que con eso va haber una mayoría necesaria para sacar la ley”. Así de optimista se mostró esta tarde el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en vísperas de la sesión especial convocada por el oficialismo en Diputados en la que el Gobierno buscará aprobar la polémica Reforma Previsional, fuertemente cuestionada por un sector mayoritario de la oposición y por especialistas.
“Somos optimistas, creemos que esto refleja una parte del acuerdo con los gobernadores,es parte de una integralidad de reformas que consideramos van a ser muy positivas para los argentinos en general. Estamos avanzando en un diálogo con todos los actores parlamentarios para tratar de buscar esa mayoría”, aseguró Peña en diálogo con los periodistas acreditados de Casa Rosada y en compañía del secretario de Medios, Jorge Grecco.
En ese sentido, el jefe de Gabinete rechazó las duras críticas relacionadas al cambio en la fórmula de movilidad jubilatoria, que dio pie al bochornoso debate de comisión de ayer en el anexo del Congreso, en el cual el Gobierno finalmente consiguió dictamen de mayoría. “Consideramos que no es cierto que se estén reduciendo las jubilaciones. Está garantizado el aumento del 5% en términos reales por encima de la inflación. No se van a reducir las jubilaciones, van a crecer”, abundó el funcionario.
Lo cierto es que durante el fin de semana, algunos sectores de la coalición de gobierno, en especial la Coalición Cívica de Elisa Carrió, planteó una serie de inquietudes en torno a la modificación en los haberes jubilatorios. El lunes, tras una reunión en Casa Rosada con los ministros a cargo de la reforma, la diputada finalmente avaló el proyecto oficial. Esa noche, junto a Mario Negri y Nicolás Massot, emitieron un comunicado conjunto en esa línea.
Ayer por la noche, y luego del escandaloso debate de comisión, los principales diputados del oficialismo seguían en sus despachos, abocados a la negociación con los bloques opositores para la sesión de mañana, que hasta ese momento aún estaba en duda. La clave, según Cambiemos, pasa por el interbloque Argentina Federal, integrado por 35 diputados y liderado por el salteño Pablo Kosiner. Varios de ellos responden a los gobernadores, que hace un mes firmaron en Casa Rosada el paquete de reformas fiscales, entre ellas la reforma tributaria, que también buscará sanción definitiva mañana en la sesión convocada a partir de las 14.
“No me quiero anticipar (a los votos). Se construye el debate minuto a minuto, somos optimistas que vamos a conseguir los votos necesarios para aprobarlo. No quiero hacer casos particulares. Vamos paso a paso”, agregó Peña en alusión a las negociaciones contra reloj de cara a la maratónica sesión de mañana. “No hicimos focus groups. Es mentira que se van a ajustar las jubilaciones. No hay costo político”, rechazó Peña, algo molesto, cuando dejaba la sala de prensa, en el primer piso de Casa Rosada.
El jefe de ministros se refirió además a la Reforma Laboral, que fue incluida en el llamado a sesiones extraordinarias publicado el lunes en el Boletín Oficial pero de muy difícil tratamiento antes de fin de año. “Está en el temario, una vez que se zanje esta discusión (por la Reforma Previsional) dependerá un poco del Senado si da a o no tratamiento. Hay un respaldo muy amplio de la CGT”, contestó Peña. “Es un tema que se verá. Vamos a trabajar y si no será en febrero”, se sinceró.