El presidente Mauricio Macri afirmó que las obras públicas se realizan "respetando la fecha de inicio y de terminación, sin que nadie se lleve un mango que no corresponde", al inaugurar ayer al mediodía el puente olímpico Ribera Sur, que conectará el municipio de Lanús, en el sur del conurbano bonaerense, con el barrio porteño de Villa Soldati.
La obra era un anhelo de los vecinos de Lanús desde hace 50 años, dijo Macri, y destacó que se ha hecho realidad la conexión con Villa Soldati, que "ha dejado de ser la parte de atrás de la ciudad de Buenos Aires". Recordó que en 15 días se realizan allí los Juegos Olímpicos de la Juventud y aseguró que la zona es ahora "el polo de desarrollo más importante de los últimos 10 años".
También participaron del acto la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal; el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y el intendente de Lanús, Néstor Grindetti. El presidente elogió al equipo de trabajo, señaló que "no es perfecto" porque "la perfección no existe".
Y agregó: "Pero nadie puede dudar que es un equipo con buenas intenciones, con honestidad, con eje en el hacer". Previamente, la gobernadora bonaerense Vidal afirmó que las obras "expresan lo que somos, que hacemos más que decir", y destacó que "las cosas cambian no por una persona sino por un equipo".
El presidente se mostró cerca de la gobernadora bonaerense y el gobernante porteño en medio de una ola de versiones acerca de que habían complicaciones en la mesa chica del oficialismo.
Télam