Mauricio Macri participó junto al alcalde de Nueva York Bill de Blasio de un acto en homenaje a los cinco rosarinos que murieron el martes pasado en un atentado terrorista en el sur de Manhattan. "Fue un ataque cobarde", dijo el presidente, que consideró que el terrorismo "no distingue límites, nacionalismos ni nacionalidades".
"Cinco familias han quedado destrozadas por este hecho, pero esto tiene que unirnos y resaltar nuestro compromiso con la paz", afirmó el Presidente. "Queremos ser parte de esta batalla que tenemos que dar todos por una convivencia en paz", dijo.
Macri y de Blasio además colocaron una ofrenda floral en la bicisenda que bordea el río Hudson, en el lugar exacto en el que los cinco amigos fueron arrollados por el camión que conducía Sayfullo Saipov, un inmigrante uzbeko radicalizado.
Del homenaje participaron también la Primera Dama Juliana Awada y el resto de los miembros de la comitiva oficial, junto al cónsul argentino en Nueva York, Mateo Estreme, y la familia de Martín Marro, uno de los sobrevivientes del atentado y que permanece internado en un centro de salud de esa ciudad.
Los amigos que murieron son Diego Mendoza, Diego Enrique Angelini, Alejandro Damián Pagnucco, Ariel Erlij y Hernán Ferruchi, que habían viajado a Nueva York para festejar los 30 años de su graduación en la escuela politécnica junto con Ariel Benvenuto, Juan Pablo Trevisán, Ivan Brajkovic y Guillermo Blanchini, que sobrevivieron, y Marro, que vive en Boston y está internado en el hospital Prebysterian de Manhattan.