En un año en que se realizarán las elecciones de medio término para renovar el Congreso, el Senado le dio acuerdo ayer a Alejo Ramos Padilla, de clara sintonía con el kirchnerismo, para ocupar el Juzgado Federal 1 de La Plata, un cargo judicial clave ya que tiene competencia electoral sobre toda la provincia de Buenos Aires, el distrito más poblado del país.
La nominación de Ramos Padilla, que actualmente se desempeña como juez federal de Dolores, fue rechazada por todo el arco opositor por su fuerte vinculación con el sector oficialista que lidera Cristina Kirchner. La vicepresidenta estuvo para abrir la sesión, la primera del año, pero se ausentó durante el debate del pliego, que fue aprobado por 40 votos a favor y 26 en contra.
Senadores oficialistas defendieron a Ramos Padilla de las críticas que recibió por el manejo que hizo de la causa que investiga la supuesta relación de funcionarios judiciales, políticos del gobierno de Mauricio Macri y periodistas con maniobras de espionaje ilegal y sus relaciones con el falso abogado Marcelo D"Alessio. El kirchnerismo usó ese expediente para fundamentar su denuncia de la existencia de una guerra judicial contra Cristina Kirchner.