Peligro inminente. El pedido de detención del fiscal contra Pablo Moyano puso ayer en estado de alerta y movilización a la Multisectorial Nacional 21F.

 

El cerco judicial que desde hace meses amenaza al círculo íntimo de la familia del líder camionero Hugo Moyano desde varios frentes, ahora parece cerrarse y pone en la cuerda floja a Pablo, el mayor de los hijos. Es que el fiscal adjunto de Lomas de Zamora, Sebastián Scalera, solicitó la detención de Pablo Moyano, secretario adjunto de Camioneros, en una causa por supuesta asociación ilícita en el club Independiente, donde el sindicalista se desempeña como vicepresidente y su padre lo preside.

Pablo se encuentra fuera del país y ayer, desde Singapur, coincidió con su padre de que este pedido de prisión "es un disparate total" y señaló al Gobierno de Mauricio Macri como impulsor de "una persecución política, mediática y judicial". Y advirtió: "No creo que hagan el show de detenerme en Ezeiza".

Según sus propios dichos, Pablo Moyano estaría regresando al país el jueves próximo, 48 horas después que el juez de Avellaneda, Luis Carzoglio, defina si acepta a rechaza el pedido de detención del fiscal Scalera.

En tanto, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, advirtió, ante las quejas de los Moyano por el pedido de detención, que "todavía hay quienes no entienden que ahora somos todos iguales ante la ley".

Hugo Moyano sostuvo que el pedido del fiscal fue impulsado "para tratar de tapar este retroactivo que piden del pago del gas".

"Es un disparate total, yo no pude todavía hablar con él porque está en un viaje programado hace tres meses, y lo aclaro porque ahora van a decir que se quiso fugar", dijo por radio Mitre al explicar que su hijo Pablo estaba en Singapur para participar del congreso de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (IFT).

Sostuvo que la cuenta por la que se lo investiga "la abrió (Javier) Cantero, cuando era presidente de Independiente", y agregó: "La abrió cuando tenía de asesora a la señora esa que se hace la barrabrava en los canales de televisión (por Florencia Arietto) y que se hace la valiente porque el esposo trabaja con (la ministra de Seguridad, Patricia) Bullrich en el Mossad".

Confirmó que la cuenta en el banco Credicoop la sigue utilizando y señaló que "intentan detener" a su hijo con la "excusa" de una conversación telefónica que tuvo Pablo con "un delegado de una empresa que hace más de 15 años que trabaja y tiene contactos con el gremio".

El ministro Frigerio, consultado sobre el tema, afirmó que "todavía hay quienes no entienden que ahora somos todos iguales ante la ley, que la Justicia es independiente".

Y, aclaró que en la actualidad "no hay un Poder Ejecutivo como el pasado que le daba órdenes a la Justicia según su conveniencia".

"Estamos viviendo en una verdadera República, eso hay que entenderlo", insistió Frigerio.

El fiscal Scalera avanzó en la acusación contra Pablo Moyano en base a escuchas telefónicas y testimonios de detenidos. Uno de ellos es Pablo "Bebote" Álvarez, exjefe de la barrabrava.

Según la acusación del fiscal, Moyano y un grupo que también incluiría a su padre Hugo y a Héctor Maldonado, secretario general de Independiente y protesorero de Camioneros, integra una organización que desde 2014 hasta 2017 defraudaron a la institución deportiva de Avellaneda.

Desde Singapur, Pablo Moyano dijo que es víctima de "una persecución política, mediática y judicial por parte del Gobierno". "Nos acusan en Independiente de que yo y Hugo recaudábamos la plata de los choripanes que se vendían en cada partido, de la venta de entradas, de cuanta plata se vendía por la venta de entradas", añadió en diálogo con radio Uno. Y, consideró que "no tiene sentido el pedido de este señor Scalera, que es un payaso, es un instrumento de Patricia Bullrich, de (Elisa) Carrió (Coalición Cívica), que constantemente están presionando al juez (Luis) Carzoglio, al juez (Luis) Armella para que hagan eso".

"Si tengo que ir en cana iré en cana. Yo ya lo dije hace siete meses atrás: sería un orgullo ir en cana con un gobierno gorila porque no firmé la reforma laboral, porque no firmé el 15 por ciento para los camioneros, no firmé el cambio de convenio a la baja para los camioneros; porque no le dimos bola a los mil millones de pesos que (Jorge) Triaca (secretario de Trabajo) nos puso de mula", afirmó el dirigente gremial.

"No creo que hagan el show de querer detenerme en Ezeiza como están acostumbrados con los bolsos, con los chalecos, con todo lo que están acostumbrados", acotó.