Con un discurso de fuerte contenido político, el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, inauguró ayer el año judicial 2013 en la sala de audiencias del cuarto piso del Palacio de Tribunales.
‘En sociedades democráticas, ya no hay pensamiento único, hay conflictos y consensos. El conflicto debe existir; no hay que tener miedo a los debates fuertes, a la colisión de intereses, porque es lo que permite la transformación de las sociedades’, afirmó.
‘Nunca hemos dicho al poder político lo que tiene que hacer, sino que hemos dicho lo que es contrario a la Constitución‘, dijo Lorenzetti tiempo después que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner dijera en diciembre pasado que espera promover reformas para ‘democratizar‘ los sistemas de ‘selección‘ de los magistrados.
En ocasión de los 150 años de la Corte, Lorenzetti dijo ayer que ‘hay suficiente experiencia en el mundo que muestra que las mayorías han tomado decisiones inconstitucionales, como por ejemplo apoyar el Holocausto, el terrorismo de Estado, o la pena de muerte. Por eso es que las decisiones de las mayorías pueden ser declaradas inválidas por los jueces cuando son contrarias a la Constitución’.
Asimismo, recalcó que ‘en la Corte hubo más cambios en este periodo que en toda su historia. Por esta razón, pensamos que el Poder Judicial también debe cambiar’. Agregó que ‘la Corte no debe gobernar, debe ser consistente con las decisiones de la mayoría del pueblo’. Los principales referentes del Gobierno Nacional faltaron ayer al acto. Entre ellos, el ministro de la Justicia, Julio Alak; la procuradora General Alejandra Gils Carbó, y la defensora General Stella Maris Martínez.
Lorenzetti apuntó a detallar la ‘censura indirecta‘ que entraña la asignación discrecional de la publicidad oficial y el derecho que tienen los medios de ejercer la ‘crítica en una sociedad democrática‘.
‘Nadie cambia el reglamento o el árbitro para poder ganar el partido‘, dijo en posible alusión a la manipulación de jueces. Además, el presidente de la Corte Suprema renovó su pedido a los poderes Legislativo y Ejecutivo para cambiar las ‘normas de procedimiento‘ con el fin de agilizar ‘megacausas‘ de ‘tragedias colectivas‘.
Lorenzetti ratificó su posición para que ‘todos‘ los jueces paguen el impuesto a las ganancias y aseguró que ‘conmueve‘ a los integrantes del máximo tribunal ‘la postergación de los derechos de los jubilados‘.