Se descubrió que el joven de 22 años que vino a Buenos Aires en Buquebús desde Colonia, se fugó del Hospital de Clínicas de Montevideo, donde estaba internado con síntomas de COVID-19.
El pasajero, que vacacionó en Europa, quedó sumariado y judicializado, y se evalúan los resultados médicos para confirmar si tiene coronavirus y eventualmente imputarle un grave delito por el que podría ser penado con hasta 15 años de prisión.
En caso de confirmarse que tiene el virus, la fiscalía a cargo de Alejandra Mángano podría imputarlo por el más grave de los delitos previstos en el Código Penal contra la salud pública, que prevé hasta 15 años de prisión, aseguraron fuentes judiciales.
Se trata del previsto en el artículo 202 del Código Penal, que reprime con "reclusión o prisión de tres a quince años" al que "propagare una enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas".
Además, de ser imputado, el joven quedará sujeto a "medidas patrimoniales para garantizar bienes" ante posibles demandas civiles por parte de los centenares de pasajeros y empleados de Buquebús obligados ahora a cumplir cuarentena.
El caso se registró el último jueves, cuando se advirtió que había un pasajero con síntomas de coronavirus a bordo de un buque de la empresa Buquebús que llegaba al puerto metropolitano proveniente de Colonia, Uruguay, con 400 personas. A raíz de ello, tanto los pasajeros como la tripulación quedaron en cuarentena.
El buque San Patricio había partido a las 18.30 del jueves desde Colonia con 400 personas a bordo y arribó a las 19.30 al puerto metropolitano, pero allí Prefectura informó a los pasajeros que había sido detectado un joven con síntomas de coronavirus.
Según informó el ministro de salud porteño, Fernán Quiros, los pasajeros fueron trasladados a un hotel, ya que el buque no cuenta con la disponibilidad para mantenerlos allí por 14 días.
Fuente: Crónica