Parece de ficción, pero es real: una familia que escapó de Siria huyendo de las bombas, de la muerte, ahora quieren regresar espantada por la inflación que hay en Argentina. Taufiq Touma y Ani Hadad vinieron a Argentina en enero. Eran refugiados sirios que buscaban un lugar mejor para su familia y encontraron Pilar, a 45 kilómetros de Córdoba capital.
Pasaron apenas 120 días y ya anticiparon que volverán a Siria. Creen que allí estarán mejor que la Argentina, donde nunca lograron adaptarse, conseguir trabajo y luchar contra la inflación.
"En Siria con 10 dólares vivimos una semana, acá todo aumenta", se quejaron. Si todo sale bien, el jueves volarán a Alepo, una de las ciudades más afectadas por la violencia.
Según diario La Voz, la pareja tiene dos hijos. Mari Flor, de 13 años, y Kristel, de 10. Son las únicas que lograron aprender algo de castellano en la escuela a la que acuden. Sus padres todavía necesitan traductor. "Faltó ayuda del Estado. Hubo varias promesas incumplidas", contó un allegado a la familia. El hombre recibió heridas graves durante una explosión en su país y en la Argentina le costó conseguir un trabajo estable.
"Pensamos que la vida aquí sería más barata y que nuestras hijas tendrían futuro, pero no lo vemos ahora", cuenta Taufiq, y agrega: "No aguantamos más, nos queremos volver a nuestro país".