El juez federal Sergio Torres recibió ayer más de un centenar de inéditas fotos de víctimas de los “vuelos de la muerte” en la última dictadura tomadas por un fotógrafo uruguayo cuando los cuerpos eran hallados en las orillas del Río de la Plata en ese país vecino, que fueron entregadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

La documentación, que consta de fotos de cuerpos con pies y manos atadas con anotaciones mecanografiadas en cada una, fue entregada por el secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Santiago Cantón, quien se entrevistó con Torres en su despacho de los tribunales federales de Comodoro Py.

El magistrado tiene a su cargo la megacausa por delitos de lesa humanidad cometidos en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), desde donde muchos secuestrados fueron llevados drogados en aviones para ser arrojados al Río de la Plata.


Búsqueda

Según fuentes judiciales, los próximos pasos serán ahora identificar al fotógrafo que tomó las imágenes, quien ya no viviría en Uruguay y sobre quien se cuenta con datos como para comenzar una búsqueda. El objetivo sería lograr su declaración para contextualizar los momentos de toma de las fotos, donde hay datos sobre los hallazgos, coordenadas geográficas, fechas y en base a eso intentar dar con más testigos.

Los documentos forman parte de los archivos desclasificados de la CIDH, parte de los cuales ya fueron traídos al país por una comisión enviada por Torres a la sede de la Comisión. En ese viaje se trajeron 35 legajos reservados de la CIDH y que fueron desclasificados con datos sobre violaciones a los derechos humanos.

Torres indicó que comienza una “etapa de análisis” de todo lo incorporado para determinar su “valor judicial”. Torres lleva adelante una investigación por los “vuelos de la muerte” en el marco de la cual detuvo y procesó a distintos acusados de haber piloteado o integrado la tripulación de los aviones, entre ellos los vuelos desde donde se arrojó al Río de la Plata a la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor.