La Cumbre Iberoamericana arrancó ayer en Asunción (capital paraguaya) sin diez de los 22 mandatarios invitados. La ausencia de mandatarios, incluyendo a Cristina Fernández de Kirchner, convierten a ésta en la cumbre con más deserciones de las que se han celebrado hasta el momento.
Según un portavoz oficial, la mandataria no asistirá a la cumbre que termina hoy ya que son días “complicados” para Fernández de Kirchner “en lo personal” ya que el jueves pasado se cumplió un año de la muerte del ex presidente Néstor Kirchner.
La mandataria optó por honrar en solitario la memoria de su esposo y suspendió su agenda pública. Ni siquiera acudió a la Cumbre Iberoamericana, donde podría haber celebrado con sus pares de la región el arrollador triunfo que se apuntó en las elecciones del pasado domingo.
También decidió cancelar la escala que planeaba hacer en Barcelona (España) la próxima semana antes de viajar a Cannes para participar en la cumbre del G20.
Otra notable ausencia es la de Dilma Rousseff, la presidenta de Brasil, una nación que enfrenta una serie renuncias de funcionarios nacionales involucrados en irregularidades. ‘En las últimas semanas ha tenido una agenda internacional muy cargada y será así hasta fin de año‘, explicó a periodistas un portavoz, al justificar la decisión de Rousseff de no asistir a la cumbre.
Tampoco asiste a la cumbre en Paraguay el presidente de Venezuela, un país que aún espera concretar su ingreso al Mercosur porque el Congreso paraguayo sigue sin aprobar su inclusión en el bloque. Hugo Chávez no participó de la XXI Cumbre Iberoamericana prevista para ayer y hoy, fechas en las que está previsto continuar el tratamiento contra el cáncer que tiene el presidente de Venezuela.
A estas ausencias se sumó el presidente de Uruguay, José Mujica. Personas cercanas al mandatario habían puesto en duda su viaje a Paraguay, al parecer por el cansancio acumulado tras su gira por Europa. Tampoco participará el presidente cubano Raúl Castro, ni sus pares de Colombia, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador y República Dominicana.
La cumbre cuenta con la presencia de los reyes de España y el Presidente del Gobierno español. También los presidentes de Perú, Chile y Bolivia. Por Argentina fue el canciller Héctor Timerman.