Después de la protocolaria, breve y tildada de fría audiencia del pasado febrero, el papa Francisco y el presidente Mauricio Macri parecieron haber dado vuelta la página ayer, en un cara a cara de casi una hora, donde los temas que queman de la agenda urgente de Argentina fueron el eje de la charla.
Hubo anécdotas, bromas y sobre todo la espontaneidad de Antonia, la hija de cinco años de Macri que hizo reír al Papa.
Fue una ‘buena reunión’ con el papa Francisco dijo Macri en una conferencia de prensa en la que brindó detalles íntimos de lo que ocurrió puertas adentro en el Vaticano.
Macri, que calificó a Francisco como ‘un líder moral’, mantuvo una larga charla con quien fuera arzobispo de Buenos Aires en la que repasaron los principales temas que alertan a la Argentina y el mundo, sobre todo la ‘preocupación compartida por la pobreza‘, tras la que el Pontífice animó al mandatario a seguir ‘adelante‘.
Eran las 10.30 en Roma (5.30 de Argentina) cuando el Presidente descendió del auto que minutos antes lo había trasladado desde el hotel De Russie hasta la entrada del Perugino, sobre la Via della Stazione Vaticana, y el Papa ya lo estaba esperando en el Aula Paulo VI.
El encuentro comenzó con un saludo cordial en la puerta de acceso y la invitación a pasar al lugar de la reunión. Cada uno se sentó a cada lado del escritorio de la sobria habitación en la que durante casi una hora Macri pudo escuchar las opiniones del Pontífice e intercambiaron puntos de vista sobre la agenda nacional e internacional.
‘Siempre es positivo encontrarse con él y confirmar que para mí, siempre fue un líder moral‘, repasó Macri en la conferencia de prensa que diera luego en la embajada argentina ante la Santa Sede.
De hecho, el embajador ante el Vaticano, Rogelio Pfirter, fue el único miembro de la delegación que entró a la reunión cuando Macri y Francisco pasaron del estudio privado de la sala contigua. Allí esperaba la ‘familia ampliada‘ del mandatario: su esposa Juliana Awada, la hija de ambos Antonia; la hija mayor de Macri, Agustina que es directora de cine y vive en Italia, y Valentina, la hija del matrimonio anterior de la Primera Dama.
Todas posaron junto a Macri y al Papa para la foto que tomó el fotógrafo de L’Osservatore Romano, el diario oficial del Vaticano.
Macri repasó con el pontífice su nuevo plan de infraestructuras y sobre todo de ferrocarriles, del que papa ‘demostró que conoce el tema‘. ‘El papa dijo que ‘en cada ferrocarril que lo recupera es una comunidad que vuelve a vivir, pues lleva trabajo y crea pertenencia a la comunidad que no tienen que irse para buscar trabajo o crearse un futuro‘, relató Macri.
‘Traje un montón de información sobre lo que hicimos estos meses, de las percepciones que tengo y quería saber sus opiniones. Fue muy útil‘, agregó. El Presidente, además, contó que le llevó al Papa ‘los planos de las obras que estamos realizando en el país, pero Francisco se reveló como un ingeniero, ya que preguntaba con precisión sobre los detalles, de obras como la Hidrovía y el Pan Belgrano‘, por ejemplo‘.
En esa línea, según narró luego el mandatario, la reunión tuvo pasajes con temas tanto nacionales como internacionales, de la lucha contra la pobreza y el narcotráfico en el país hasta la paz en el mundo y el cambio climático.
‘Fue una buena reunión, como estimo que siempre hemos tenido dos personas que nos conocemos hace mucho tiempo. Hablamos de los indicadores de pobreza en la Argentina, ‘una verdad compartida, aceptada ahora con los números del Indec, y que nos convoca a una tarea enorme en la que no tenemos que perder un segundo’, aseveró Macri.
‘Hablamos de la necesidad de generar trabajo, educación, capacitación, y de volver a convocar a todos a la cultura del encuentro. Le mostré la enorme asistencia social que desplegamos en 10 meses, aumentando lo que había, y coincidimos en que el asistencialismo debe ser transitorio porque, sino, condena a mucha gente a la frustración’, explicó el Presidente.
Asimismo, formó parte de la agenda la preocupación común por el cambio climático, por lo que el Presidente narró el éxito de las últimas licitaciones para avanzar en la instalación de energías renovables en el país y el Pontífice comentó que tanto el Aula Paulo VI, como la residencia de Santa Marta, tienen energía solar.
La lucha contra el narcotráfico también estuvo en la agenda. ‘Me reiteró que es una batalla en la que no hay que ceder y que la frontera es el primer paso‘, afirmó Macri.
Por último, Macri detalló que le pidió al Pontífice que Dios lo ‘ilumine‘ para poder llevar ‘a los argentinos por el camino correcto‘, a lo que Francisco le respondió con un alentador: ’Fuerza y para adelante’‘.
