La empresa argentina de fabricación de muñecos con apariencia real “Casita de Muñecas” presentará este martes el primer muñeco bebé con Trisomia 21, en el marco de una serie de actividades que se realizarán por el día internacional de las personas con síndrome de Down (miércoles 21).
“El concepto de diversidad es muy importante, ya que creemos que amplía la capacidad de juego de los niños; el objetivo es ayudar a que todos los chicos puedan aprender sobre las diferencias que existen entre todas las personas”, explicó Federico Galanterni, dueño de la empresa.
El empresario contó que la idea (del nuevo muñeco), que tiene gestos y características físicas de las personas con síndrome de Down, al que nombraron “Oli”, surgió por una anécdota que le narró un allegado.
“Una persona nos contó que le preguntó a una nena con síndrome de Down si le gustaban las muñecas, pero la nena le respondió que no, porque no había ninguna que se le parezca a ella”, explicó. “Cuando escuchamos eso se nos puso la piel de gallina, y sentimos que teníamos que hacer algo”, dijo. La empresa que empezó hace cuatro años en el barrio porteño de Villa Soldati, comenzó a trabajar en el proyecto que le acercó a la Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (Asdra) para recibir asesoramiento sobre la Trisomia 21, una alteración genética de los cromosomas del par 21 que provoca discapacidad intelectual y que el médico John Langdon Down describió en 1866.
“SI bien no lo mostramos en público hasta el momento las repercusiones son muy buenas”, aseguró el dueño de la fábrica. El muñeco será presentado el martes en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, junto a integrantes de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete y de Asdra.
Oli es armado en forma artesanal, relleno con vellón siliconado que lo hace blandito y “adorable al abrazar”, promociona la marca. Están pintados a mano, vestidos con diseños especialmente confeccionados con telas de algodón de alta calidad, bordados exclusivos y un particular perfume.
Oli llega, según sus creadores, para “ayudar a que todos los chicos puedan aprender sobre las diferencias que existen entre todas las personas y lo naturalicen”. “El combate contra la discriminación está en marcha. Casita de Muñecas cuenta con una riquísima historia en cuanto a la exaltación de estos valores. Nuestros bebés son flaquitos o regordetes, son rubios o morochos, son latinos, de tez negra u orientales”, explica la firma. “Afrontamos un hermoso desafío: el diseño de muñecos con las características de bebés con síndrome de Down. Pondremos un esmeradísimo cuidado”, aclaran. Télam