Brenda Barattini, la mujer que mutiló los genitales de su amante con una tijera de podarmientras mantenía una relación sexual en su departamento de la ciudad de Córdoba, fue condenada este miércoles a 13 años de prisión por el delito de tentativa de homicidio calificado por el vínculo y alevosía.

El Tribunal de la Cámara de Segunda Nominación del Crimen de Córdoba, conformado por los jueces Ítalo Vitozzi (presidente), Mónica Traballini y Mario Centeno, dictó la pena luego de que un jurado popular integrado por cuatro hombres y cuatro mujeres declarasen culpable a la acusada de manera unánime.

La condena coincidió con lo que habían solicitado tanto la querella como la fiscal de juicio, Laura Battistelli. Ambas partes pidieron 13 años de prisión y tratamiento psicológico para la acusada. La abogada de la querella, Carolina Testa, pidió además un resarcimiento civil de 2.027.102 pesos por gastos de curación, lucro cesante y daño moral.

En cambio, la defensa, a cargo del abogado Iván Sironi, había pedido que se absuelva a su clienta de la tentativa de homicidio y que se la condene por lesiones gravísimas calificadas por alevosía, delito que supone una pena de entre 3 y 10 años.

Tras la lectura del fallo, se produjeron incidentes con familiares de Barattini. Algunos se descompensaron, otros insultaron, hubo empujones y algún cristal que se rompió.

 

 

El hecho ocurrió en noviembre de 2017. La joven atacó al hombre, Sergio F., en su departamento de Chacabuco 580 de la capital provincial, luego de cubrirle los ojos y mientras le practicaba sexo oral. En un principio, Barattini denunció que había sido violada, pero su estrategia se derrumbó rápidamente con el correr de la investigación.

El hombre, de 42 años, fue rescatado tras el ataque por vecinos que oyeron gritos y dieron aviso a la policía. Según contó, luego de una operación que le reconstituyó su aparato genitourinario pudo recuperarse favorablemente, aunque aduce haber quedado con traumas psicológicos.

El juicio oral inició el 26 de agosto pasado. Barattini había sido acusada inicialmente por “lesiones gravísimas calificadas por el vínculo y alevosía”, pero después de escuchar los primeros testimonios -entre ellos el del por entonces novio de la joven- la fiscal Battistelli pidió el cambio de imputación, pasando a tentativa de homicidio, lo cual el tribunal aceptó.

A raíz de ello, el debate se suspendió. Al reanudarse, llegó el turno de la declaración de Barattini, que cambió de estrategia y reconoció haber premeditado el ataque, aunque sostuvo que nunca tuvo intenciones de matar a la víctima. "Sí, pensé lastimarlo. Planifiqué lastimarlo. Quise herirlo, no más que eso”, afirmó.