Es abogada, escribana y madre de tres hijos, pero llama la atención por sus lujosos vestidos. Claudia Ledesma Abdala, de 39 años, tiene las puertas para convertirse mañana en la nueva gobernadora de Santiago del Estero y heredera del feudo de su esposo y actual mandatario provincial, Gerardo Zamora.
Claudia Zamora, así se hace llamar ahora desde que su marido la nominara como candidata, es amplia favorita para pasar de primera dama a gobernadora.
El traspaso familiar del poder no es una práctica nueva en Santiago del Estero. Fue la estrategia utilizada por Carlos Juárez y su esposa Mercedes “Nina” Aragonés, quienes de manera directa o indirecta, estuvieron al frente del poder desde 1948 hasta 2004 tras el escándalo por el crimen de la dársena en el que mataron a dos jóvenes.
Este hecho terminaría con la intervención federal de Santiago del Estero hasta 2005 cuando llegaba al poder Gerardo Zamora, un radical K que tenía muy buena sintonía con Néstor y ahora con Cristina.
La seguridad que le daban los votos, empujó a Zamora a buscar su re-reelección aunque un tercer mandato consecutivo estaba prohibido por la Constitución Provincial. Pero cuando ya se creía que había logrado despejar el camino judicial, la Corte Suprema de Justicia de la Nación invalidó su candidatura. Allí comenzó a gestarse la candidatura de Claudia Zamora, nieta de un dirigente radical, Claudia tiene a su cargo el Registro de la Propiedad del Automotor de la capital santiagueña.
Fue defensora del Pueblo en el municipio de La Banda entre 2003 y 2005, en el que se casó con Zamora. No acompañó en ningún cargo público al mandatario santiagueño, pero sí en su actividad política.
Cuando el gobernador postuló en octubre a su esposa, los santiagueños por primera vez escucharon la voz de Claudia: una hermosa mujer que hasta ahora sólo era conocida por sus apariciones envuelta en costosos vestidos de lentejuelas en las páginas de 30 Días, una versión local de las revistas de ricos y famosos ‘presentada por Mirtha Legrand y por el mismísimo Gerardo Zamora’, que nació para mostrarle al mundo hasta dónde es capaz de llegar el ‘glamour santiagueño’.
Observadores locales estiman que si Claudia es electa gobernadora, cuando finalice un eventual mandato, Gerardo Zamora podría volver a aspirar a otros dos periodos consecutivos que lo mantengan en el poder hasta 2025.
El único antecedente de actuación pública Claudia fueron dos años en que se desempeñó como defensora del Pueblo en la ciudad de La Banda. Y fue blanco de denuncias por la ocupación de 1.700 hectáreas en Agua Amarga; y con enriquecimiento de su familia gracias a los contactos con el Estado. Su padre trabaja en el Ministerio de Salud.

