La Corte Suprema de Justicia prorrogó hasta el próximo 26 de abril la feria judicial extraordinaria para los tribunales nacionales y federales de todo el país, dispuesta tras la declaración de emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus , y ante la extensión hasta ese día del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el Gobierno.
La misma decisión tomó la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires con guardias mínimas y atención de asuntos urgentes en todo el ámbito del Poder Judicial provincial.
En la Corte nacional, la decisión fue tomada a través de la Acordada 10/2020, firmada hoy domingo por el presidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz , y los ministros Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda. Sus colegas Horacio Rosatti y Ricardo Lorenzetti, fuera del tribunal por la cuarentena y porque están en Santa Fe, fueron consultados y estuvieron de acuerdo.
La Corte dijo en su acordada que como cabeza del Poder Judicial tiene la obligación de acompañar desde su ámbito las decisiones sanitarias del Poder Ejecutivo, que está en mejores condiciones de adoptar criterios por la información con que cuenta.
El presidente de la Corte Carlos Rosenkrantz será el juez de feria y las cámaras designarán a sus autoridades para atender los asuntos que no toleren demoras, especialmente las causas donde esté el juego el derecho a la salud y la protección de personas con discapacidad .
Con estas líneas quedan habilitados los pagos derivados de estas situaciones para que no haya mas demoras.
Los jueces ya habían dicho que se debía dar además atención a las cuestiones vinculadas con la emergencia sanitaria.
Mas allá de esta decisión, los tribunales están trabajando de manera remota con los asuntos del turno penal y los derivados de la pandemia. Pero siguen con sus empleados desde sus casas trabajando en el resto de los casos donde las constancias estén subidas al sistema informático. En ocasiones se trasladan al tribunal a buscar copias de algún expediente.
Algunas cámaras de apelaciones analizan medidas que podrían permitir a los jueces seguir dictando sentencias de manera remota desde sus casas para que no se detenga la prestación del servicio de justicia.
Algunos trámites ya se habilitaron, como el cobro de los juicios civiles que ya estaban en condiciones de ser liquidados, los honorarios de los abogados y los pagos de indemnizaciones laborales, pero aún se está lejos de que se puedan tomar audiencias por video en un juicio laboral. Sí se tomaron indagatorias en causas penales que no admitían demoras.
Fuente: La Nación