Manifestantes nucleados en la CGT y las dos CTA, además de miembros de movimientos sociales, participan en la Plaza de Mayo del acto central del sindicalismo en contra de la política económica y laboral del gobierno.
El acto central estaba previsto alrededor de las 16 pero comenzó 20 minutos antes, tras los incidentes que se registraron a metros del palco.
"Venimos a presentar nuestra agenda social" dijo el único orador, el dirigente moyanista Juan Carlos Schmid, quien afirmó que "no venimos detrás de ninguna candidatura".
"Nos acusan de atentar contra empresas, de que somos un freno para las inversiones. Yo les quiero recordar que somos hijos de una época dorada de este país, somos hijos del peronismo", destacó el titular del gremio de Dragado y Balizamiento.
"Estamos frente a un Estado Ausente, un Estado que hace rato se olvidó de proteger al hombre que se levanta a la madrugada y va a construir la grandeza de esta Nación", sumó el dirigente.
Schmid agregó: "Nosotros también queremos cambiar. Queremos cambiar importaciones por exportaciones". Y pidió un aumento de emergencia para jubilados, que se terminen las intervenciones en los sindicatos, rechazo a cualquier tipo de reforma laboral y emergencia alimentaria para los más desposeídos.
Y convocó al 25 de septiembre al Comité Confederal para definir un plan de lucha que incluya un paro general.
Para cerrar, el líder sindical desmenuzó la lista de reclamos de su agenda social:
-Aumento de emergencia para jubilados
-Que se terminen intervenciones en sindicatos -Rechazo a cualquier reforma laboral o previsional
-La vigencia de los convenios colectivos de trabajo
-La defensa del modelo sindical y de las obras sociales
-El control de precios sobre alimentos y medicamentos
-La sanción de la emergencia social alimentaria para sectores desprotegidos
Antes, Schmid reclamó la "aparición con vida de Santiago Maldonado", el joven que desaparición en Chubut.
Organizaciones sociales como MTD, Ctep, Barrios de Pie y el Movimiento Evita participaron también del acto.
En Plaza de Mayo, en tanto, la organización corría por cuenta del Sindicato de Camioneros, que montó el escenario en el centro, de espaldas a la Casa Rosada, e instaló vallas para organizar la concurrencia.
El acto cerró con la tradicional Marcha Peronista.