Recesión. Índices de despachos de cemento y producción de autos son elementos que, según fuentes oficiales, pueden indicar el fin de la recesión.

 

La actividad económica cayó en 2018 un 2,6%, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) al dar a conocer el Estimador Mensual de Actividad. Pero en el último mes del año cerró con una suba desestacionalizada de 0,7%, lo que desde el Gobierno nacional de Mauricio Macri fue indicado como una señal de que la baja habría encontrado ya su piso y que de ahora en adelante comenzará a crecer, según lo publicado por la agencia oficial de noticias Télam.

En diciembre la actividad económica creció 0,7% mensual sin estacionalidad, debido principalmente al buen desempeño del agro, el comercio y el turismo y según informaron fuentes oficiales este dato preliminar indicaría que el piso de la recesión habría sido en noviembre. 

En términos interanuales, la actividad cayó 7% debido a que la comparación es con niveles muy altos del índice, previos a la recesión; por ello, en los próximos meses se esperan datos interanuales negativos, aun cuando se mantenga, como se espera, el crecimiento en los datos mensuales sin estacionalidad.

Piso

Con estos resultados se prevé ‘que la recesión habría tocado su piso en noviembre y que a partir de diciembre la economía ya se encontraría en fase de recuperación‘, afirmaron. 

‘Algunos indicadores de actividad de enero confirman esto, incluyendo índices privados y datos oficiales de despachos de cemento, producción de autos, molienda de soja, demanda de electricidad y producción de acero, que crecieron en términos desestacionalizados en enero‘, agregaron.

En 2018 la economía de 2,6% marcó la peor desde 2009, principalmente consecuencia de la peor sequía de los últimos 50 años: los sectores no vinculados al agro cayeron 1,6%, un número similar al registrado por dichos sectores en la recesión de 2016 y bastante menos que en la de 2014 (-2,9%).

Casi la mitad de la caída de 2018 (1,1 punto porcentual) se explica directamente por el agro, que cayó 15,9%, y los efectos son mayores si se consideraran sectores vinculados como transporte, comercio e industria.

Lenta

Una vez conocidos los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, desde la consultora Ecolatina se señaló que ‘la recuperación de la economía será lenta‘. ‘En este sentido, esperamos para 2019 una mayor cosecha agrícola (se espera que aporte algo más de un punto de crecimiento) y un repunte de la mayoría de los sectores transables, traccionados por la mejora de la competitividad cambiaria y las expectativas de crecimiento de la economía brasileña‘, agregaron.

Desde la consultora privada advirtieron que ‘sin embargo, el resto de las actividades (dependientes de la demanda doméstica) seguirán en retroceso producto del desplome del mercado interno. De hecho, los dos componentes de la demanda interna, consumo e inversión, se mantendrán debilitados‘.

Tarifas

Ecolatina consideró que el consumo se verá impactado por los aumentos tarifarios y la inestabilidad cambiaria que ‘le pondrán un techo a la recuperación del salario real, el cual recién comenzará a mostrar mejoras en la previa electoral. Pero esta recomposición no será suficiente para compensar el deterioro previo y el año cerrará con una caída del salario real promedio del orden de 3,5%‘. 

En este sentido, la inversión también sufrirá debido a que, a diferencia de otros años electorales, el aporte del sector público en materia de infraestructura será limitado. 

‘Esperamos una mejora considerable por el lado de las exportaciones y que continúe la contracción de las importaciones‘. 
‘En suma, durante 2019 la actividad volvería a caer cerca de 1%, encadenando dos años recesivos por primera vez desde el bienio 2001-2002. De todas formas, en términos desestacionalizados habría una recuperación parcial de la actividad en más de 3% a lo largo del año‘, concluyó el informe.

Fuente: Télam

Empleos: baja de 1,5%

 

En 2018 se perdieron 191.300 empleos registrados, lo que implicó una caída del 1,5% respecto a los niveles registrados en 2017 y una suba de 0,6% respecto al cierre de 2016, según los datos proporcionados hoy por el Ministerio de Producción y Trabajo en base al Sistema Integrado de Previsión Argentino (SIPA).

El trabajo detalla que en diciembre de 2018 hubo 12.196.000 trabajadores registrados, lo que representa 191.300 menos que un año atrás (-1,5% ), y 92.000 más, (+0,6%), respecto al cierre de 2016.

Dentro del sector privado, en el último mes de 2018 respecto a diciembre de 2017 bajó el número de asalariados registrados (-131.000), como el de los trabajadores independientes en su conjunto (-15.000 trabajadores menos). En cambio, los asalariados particulares se incrementaron en 21.000 empleos.

Los empleos del sector privado sumaron 6,2 millones en diciembre de 2018. La cantidad de trabajadores de este sector se redujo en 131.000 (-2,1%) con respecto a diciembre de 2017 y en 0,2% con respecto a noviembre de 2018, en términos desestacionalizados.