La senadora nacional Beatriz Rojkés, esposa del gobernador tucumano José Alperovich, mantuvo una discusión con uno de los damnificados por las inundaciones que reclamaba asistencia oficial y lo trató de “animal” y “vago”.

“Yo tengo diez mansiones, no una, y estoy acá. Yo puedo estar en mi mansión ahora pedazo de animal, vago de miércoles”, le reprochó la expresidenta provisional del Senado a uno de los hombres que le pedían obras y ayuda para la gente que perdió sus casas por el desborde de ríos en las últimas semanas.

La difusión del video con el momento de la discusión se propagó por las redes sociales de Internet, mientras la senadora usó ayer su página de Facebook sólo para promocionar una muestra de productos artesanales de mujeres en un museo provincial. El incidente ocurrió recientemente en la localidad de El Molino, una de las zonas más perjudicadas por el temporal de lluvias y desborde de ríos que afectó a la provincia, donde la legisladora se encontró con un grupo de damnificados.

Allí, un hombre increpó a la dirigente justicialista al advertirle que los vecinos “no pueden estar tranquilos” en la zona y disparó: “Ustedes tienen el poder para hacer las cosas”. Los pobladores la cuestionaban durante una recorrida que hizo junto a la ministra de Desarrollo Social, Beatriz Mirkin, cuando Rojkés les dijo: “No se hagan los enojados ni se pongan locos, porque toda la provincia está afectada. Quédense tranquilos, que estamos acá para ayudar”. Incluso, les espetó: “No es mi culpa si viene el río”.

En ese marco, uno de los hombres le señaló que sólo recibieron ayuda de los vecinos mientras “usted tiene una casa, una mansión allá”. “Yo tengo diez mansiones, no una, y estoy acá. Yo puedo estar en mi mansión ahora pedazo de animal, vago de miércoles”, le respondió la legisladora y presidenta del justicialismo provincial.

Sin embargo, éste no fue el primer exabrupto que protagoniza Rojkés, quien en 2012 trató de “borracha” a una familia cuya hija de seis años desapareció en Tucumán y fue hallada sin vida. En otra oportunidad le dijo a la madre de un joven que se suicidó tras padecer adicción a las drogas que “al menos ahora, Dora (Ybañez), vas a poder dormir tranquila, porque tu hijo no está más en la calle”.

Las expresiones de la esposa del gobernador provocaron el repudio de varios sectores. El diputado nacional José Cano señaló que “es lamentable que la respuesta del Estado para quienes han perdido todo sea el calificativo de vago y no una política de Estado”.

El concejal de Yerba Buena, Pedro Albornoz Piossek, solicitó la “renuncia” de la legisladora, a quien tildó de “desalmada”. El diputado Alberto Asseff también se sumó a las críticas y señaló que “es la verdadera cara de un Gobierno que no gestiona y para empeorar todavía más la situación, se burla de la desesperación de la gente”. Fuente: DyN