El Gobierno firmó ayer un acuerdo con empresarios y representantes de los trabajadores para aumentar la producción de motos con mayor integración de componentes nacionales.
‘Queremos una industria nacional pujante, competitiva y federal‘, señaló el ministro de Producción, Francisco Cabrera, tras la firma del acuerdo en el Salón Belgrano del Palacio de Hacienda.
Uno de los compromisos del sector privado en este acuerdo es avanzar en un programa de desarrollo de proveedores que permita aumentar la integración local de partes y piezas para motovehículos bajo estándares de calidad internacionales.
En una primera etapa se cambiará el esquema arancelario para pasar de uno estructurado a otro nuevo por modalidad de importación que favorezca el ensamble local: se aumentarán del 20 por ciento al 35 por ciento los aranceles para la importación de motos de menos de 250 centímetros cúbicos y bajará del 20 por ciento al 10 por ciento para la importación de motos desarmadas (CKD), con el objetivo de que sean ensambladas localmente.
Con este acuerdo se espera generar 4.000 nuevos puestos de trabajo y quintuplicar las exportaciones en el plazo de cuatro años, según la agencia oficial de noticias Télam.
Por el sector público firmaron el acuerdo el Gobierno nacional y el de la Ciudad de Buenos Aires y las provincias de Córdoba, Santa Fe y Chaco. En representación de los privados, firmaron la Cámara de Fabricantes de Motovehículos (Cafam), la Asociación de Fabricantes Argentinas de Componentes (AFAC) y la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra). Por parte de los trabajadores firmaron la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA).
En la actualidad funcionan en Argentina siete terminales que concentran el 90 por ciento del mercado local, incluyendo tres de las 10 multinacionales más importantes. El sector genera 2 millones de dólares en divisas por exportaciones anuales. De todas maneras, la integración de piezas nacionales es sumamente baja (5 por ciento) y las importaciones totalizan 300 millones de dólares al año, que en un 85 por ciento corresponden a piezas para el ensamblaje local.
La adecuación arancelaria incluida en el acuerdo firmado ayer bajará el costo de las motos de mayor cilindrada y evitará que se importen totalmente armadas las de menor tamaño, según la Cámara Argentina de Fabricantes de Motovehículos (Cafam).
‘Desde comienzos de 2016, en cada encuentro con el Ministerio de Producción y la Secretaría de Industria hemos enfatizado la necesidad de una modificación arancelaria que favorezca a aquellas empresas que emplean mano de obra argentina’, sostuvo Lino Stefanuto, titular de la Cámara Argentina de Fabricantes de Motovehículos. Agencias