Dirigentes sindicales de diversos sectores evalúan la posibilidad de realizar una movilización y hasta incluso un paro para los primeros días de junio en respuesta al veto del presidente Mauricio Macri a la ley antidespidos que impulsó el peronismo, mientras el gobierno defendió la medida y cuestionó a quienes se ‘aferran al pasado‘ y espantan la ‘posibilidad de crear trabajo‘.
El jefe de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, adelantó ayer que la decisión de una eventual movilización se resolverá ‘esta semana‘ y admitió que por lo que pudo dialogar con el mandamás de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, el paro se llevará a cabo entre los ‘primeros diez días de junio‘.
Ese argumento fue sostenido también por el jefe de la CTA kirchnerista, Hugo Yasky, quien incluso estimó que la medida de fuerza podría realizarse alrededor del 10 de junio.
Por su parte, el secretario general de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), Juan Carlos Schmid, no descartó ayer la posibilidad de impulsar un paro general como respuesta al veto a la emergencia ocupacional, aunque planteó la necesidad de ‘analizar‘ previamente ‘las alternativas‘. ‘El paro nunca se descarta. Hay que reunirse y discutir. Juntarnos, evaluar la situación, analizar las tendencias y estudiar las alternativas‘, sostuvo el dirigente portuario.
Macri volvió a defender la decisión de vetar la Emergencia Laboral al considerar que se trata de una iniciativa ‘anti-empleo‘ y remarcó que ‘el empleo no se genera a través de imposiciones, prohibiciones o sometimientos. Se genera si hay confianza, ese valor que es capaz de impulsar o detener a un país entero‘.
A su vez, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, también justificó el veto al recordar que Macri ‘avisó‘ que la ley ‘no favorecía a la generación de empleo‘ y por eso ‘usó las facultades constitucionales para no permitir que esta ley se promulgue‘.
Sin embargo, el sindicalismo discute la implementación de una medida de fuerza para la cual, si bien no hay una fecha estipulada, se sabe que ‘debe ser contundente después de una marcha como la del 29 de abril‘, dijo Micheli a radio Del Plata.
Por otro lado, el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Héctor Recalde, adelantó que van a ‘acompañar‘ el reclamo de los gremios ya que estimó que ‘alguna consecuencia va a tener‘ la decisión adoptada el viernes por Macri.
‘La decisión le corresponde a los trabajadores y a sus dirigentes sindicales y si la decisión es tomar algún tipo de reacción en contra del veto nosotros vamos a acompañarla‘, confirmó Recalde en diálogo con radio El Mundo.
La diputada nacional del GEN Margarita Stolbizer también cuestionó el veto de la ley antidespidos al calificarlo como ‘un error político‘ y considerar que la ‘agenda de prioridades‘ del Gobierno ‘ha sido y sigue siendo equivocada‘.
En la otra vereda de la polémica se instaló, inesperadamente, la gobernadora kirchnerista de Tierra del Fuego, Rosana Bertone, al sostener ayer que durante el gobierno de Eduardo Duhalde se aprobó una ley antidespidos que provocó ‘una cantidad inmensa de cesantías‘.
En declaraciones a radio El Mundo, Bertone opinó sobre el veto presidencial a la ley antidespidos, recordando lo sucedido en 2001 durante el gobierno de Duhalde: ‘Con la aprobación de la ley antidespidos, en esa época no tuvimos una buena experiencia, hubo una cantidad inmensa‘ de trabajadores cesanteados.
‘Hay que buscar otro tipo de medidas‘ porque ‘a veces leyes como estas terminan afectando más de lo que benefician‘, señaló. DyN-Télam

