Los candidatos presidenciales ocupaban parte de su agenda de actividades con ensayos junto a sus equipos de campaña, con el objetivo de llegar bien preparados al primer debate obligatorio que protagonizarán mañana en la Universidad Nacional de Santiago del Estero.
Además de la expectativa que la pulseada televisiva genera en el tramo final de la campaña hacia los comicios del 22 de octubre, la Cámara Nacional Electoral (CNE) prefiere que el intercambio no se convierta en un "show televisivo" y que, por el contrario, sea una oportunidad para que la ciudadanía compare propuestas.
"La idea es que sea un debate donde puedan incluirse exposiciones muy vehementes, pero que no haya agresiones. Lo importante es que la ciudadanía conozca qué tienen para decirnos los candidatos", dijo el secretario de actuación de la Cámara Nacional Electoral (CNE), Sebastián Schimmel, a radio La Red.
Con matices, los aspirantes a la Casa Rosada dedicaron parte de su agenda de esta semana a preparar la presentación de sus propuestas.
El ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, fue uno de los más activos: mantuvo un apretado cronograma de trabajo y sólo el jueves hizo un alto en sus recorridas para preparar su exposición de mañana.
Ayer Massa fue el único orador de un acto organizado por gremialistas en Plaza Congreso para celebrar la sanción en el Senado de la ley que modifica el Impuesto a las Ganancias y expresar su apoyo a las últimas medidas económicas tomadas por el Gobierno.
El candidato de UxP anticipó que en el debate dará a conocer los nombres de quiénes estarán a cargo del Ministerio de Economía y del Banco Central, en caso de convertirse en presidente. También ratificará que los directores de esa entidad serán "mitad oficialistas y mitad opositores".
Por su parte, el postulante de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, se recluyó esta semana para dedicarse casi exclusivamente a su entrenamiento para el debate.
La candidata presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, menguó en los últimos días sus apariciones públicas y se sometió a varios adiestramientos con sus asesores más cercanos.
"El candidato que no esté en uso de la palabra pero se sienta aludido por lo que está expresando el otro candidato puede pedir el derecho a réplica", dijo Schimmel.
"Va a tener 45 segundos para responder lo que escuchó en base a lo que se sintió aludido. Son hasta cinco oportunidades por debate por candidato y tienen que pedirlos mientras el otro candidato está en uso de la palabra", afirmó.
Además detalló que los postulantes van a poder pedir "varias réplicas respecto de la exposición de un candidato e incluso una réplica respecto de la réplica".
Los cinco candidatos presidenciales realizarán hoy una prueba, en la que tendrán "la oportunidad de ver las cámaras, y conocer el mayor detalle de todo".
La Cámara de Turismo de la provincia espera para este fin de semana una ocupación hotelera del 100%.
La agenda
El debate de mañana está previsto a las 21. El domingo 8 se realizará el segundo debate. El lugar: la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Los que no asistan al debate recibirán una sanción que consiste en no otorgarle espacios de publicidad.