La Cámara de Diputados convirtió ayer en ley el proyecto de reforma previsional que modifica el sistema de actualización de los haberes de la clase pasiva, con el voto favorable de Cambiemos y legisladores que responden a los gobernadores peronistas.
En una encendida sesión que se prolongó por más de 17 horas, la iniciativa se aprobó con 127 votos que fueron aportados por la coalición oficialista y legisladores de Argentina Federal que responden a gobernadores del Partido Justicialista (PJ), mientras que el rechazo al proyecto fue expresado por un arco opositor conformado por el Frente para la Victoria, el massista, Compromiso Federal y la izquierda, que cosechó 117 sufragios.
El clima de violencia en las inmediaciones del Congreso y los cacerolazos influyeron a lo largo de toda la sesión, situación que motivó reiterados pedidos de la oposición, sobre todo del Frente para la Victoria (FPV)-PJ y del Frente Renovador, para que el debate se aplazara para otro día.
El proyecto convertido en ley establece que desde marzo las jubilaciones, pensiones y Asignación Universal por Hijo se actualizarán en forma trimestral en base a un sistema combinado entre la variación de la inflación (en un 70 por ciento) y del aumento salarial promedio (un 30 por ciento) y el desfasaje inicial entre un sistema y otro se compensará con una suma fija por única vez para los haberes menores a diez mil pesos. La ley establece que los trabajadores podrán optar por jubilarse a los 70 años.
De las 17 horas, doce estuvieron dedicadas a debatir la iniciativa, pero las primeros cinco se las llevaron recursos y cuestiones de privilegio que interpuso la oposición en un intento por levantar la sesión. Durante el debate, el presidente del bloque del FPV, Agustín Rossi, dijo que “este índice de movilidad jubilatoria es perverso desde la A hasta Z”.
Para iniciar la sesión el oficialismo reunió el quórum reglamentario con la participación de 105 diputados propios, 3 del bloque que encabeza Martín Lousteau, y legisladores que responden a los gobiernos provinciales de Misiones (4), Córdoba (4), Santiago del Estero (3), Entre Ríos (2), Chaco (2), Tucumán (2), Salta (2), Chubut (1) y Neuquén (1), además del sindicalista Alberto Roberti.
Los nuevos aportes al quórum se comenzaron a gestar en la reunión realizada el viernes en Diputados entre mandatarios provinciales y representantes del Poder Ejecutivo y del oficialismo parlamentario. Con el compromiso del bono de compensación para los jubilados, trece gobernadores manifestaron el lunes su respaldo a la reforma en otra reunión que mantuvieron -minutos antes del inicio de la sesión- con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, en el despacho de Emilio Monzó en Diputados, y que fue leído por el Gobierno como un fuerte gesto de apoyo al pacto que suscribieron el mes pasado.
Al encuentro asistieron los gobernadores María Eugenia Vidal (Buenos Aires); Gerardo Morales (Jujuy), Eduardo Valdés (Corrientes), Juan Manuel Urtubey (Salta), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Casas (La Rioja), Juan Manzur (Tucumán), y Domingo Peppo (Chaco). También, Rosana Bertone (Tierra del Fuego); Alberto Weretilnek (Río Negro); Mariano Arcioni (Chubut); Hugo Passalacqua (Misiones) y Horacio Rodríguez Larreta (Ciudad de Buenos Aires).
El debate del proyecto se inició con el discurso del macrista Eduardo Amadeo, quien detalló que con el nuevo sistema de actualización trimestral, los jubilados “van a cobrar en el 2018 un aumento del 22 por ciento de sus haberes, es decir cinco puntos más de la inflación prevista para el próximo año”.
Ganancias: Qué sueldos tributarán desde enero
Desde enero de 2018, los trabajadores solteros sin hijos pagarán Impuesto a las Ganancias si ganan más de $29.855 de sueldo neto, luego de las deducciones de jubilación y obra social. Y los trabajadores casados con 2 hijos si perciben más de $39.495 mensuales netos, informaron ayer medios nacionales.
Estos valores representan un alza del 28,77% con relación a los vigentes en 2017 que eran de $23.185 y $30.671.
Para las actualizaciones de los valores fue utilizado el índice RIPTE a octubre del 2017″, según la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que toma en cuenta la variación de los salarios formales según los cálculos del Ministerio de Trabajo.
La diferencia entre los solteros sin hijos menores de 18 años o incapacitados para el trabajo y los casados con hijos se debe a que por cada hijo la deducción anual sube de $ 24.432 a $ 31.461, informó ayer el diario Clarín. Mientras se permite una deducción por cónyuge si está efectivamente a cargo (porque no tiene ingresos) que pasa de $ 48.447 a 62.385 anuales.
También se actualizaron en el mismo porcentaje otras deducciones permitidas con un tope similar al mínimo no imponible anual, como la del personal doméstico, y hasta un porcentaje y con tope como los intereses hipotecarios, alquiler de inmueble destinado a casa habitación, cuotas de medicina privada y gastos médicos. Las deducciones para los empleados de la zona patagónica son un 22% más altas.
En tanto, el aguinaldo no está eximido del pago del impuesto. Lo que se autoriza es a prorratearlo para el cálculo de la retención durante todo el año, de tal manera que no afecte el cobro íntegro en el momento de su cobro en junio y diciembre.