La Resolución de la AFIP por la que desde hoy la electrónica es de uso personal (un artículo por cada individuo) y por lo tanto se habilita el ingreso de un teléfono celular, una notebook o una tableta sin la necesidad de declarar los equipos, abre nuevamente la interrogante de si conviene o no comprar en el país vecino.

 

Es que hasta la fecha, si la compra excedía los US$ 300 para cada adulto y US$ 150 para los menores de edad, se debía abonar el 50% por el excedente. Antes de la devaluación de abril, ese pago extra los viajeros lo sumaban al precio de compra y aun así, el producto les salía más barato que lo que podía costarles en una casa de electrodomésticos local, pero luego de la crisis cambiaria las compras en el exterior se encarecieron mucho para los argentinos.

 

Ahora bien, sin el pago del impuesto, comprar celulares y notebooks en Chile vuelve a hacerse accesible, aunque no tan conveniente. Lo que prevalece para que los argentinos sigan eligiendo al vecino país como destino para hacer sus compras será la variedad de productos y el acceso a algunas marcas y modelos que es difícil conseguir en los comercios locales.

 

Algunos ejemplos:

Mientras que en Chile una Notebook marca Lenovo i7 con 4GB de memoria RAM cuesta 579.990 pesos chilenos ($35.892), en Argentina el mismo artículo se vende por $ 36.499 de contado.

 

Una Notebook HP, Intel Core i7, con 8GB de memoria y una pantalla de 13.3" en Chile cuesta 799.990 pesos chilenos ($49.507,34), y en Argentina $55.619 de contado o $61.799 financiada.

 

Un Celular liberado marca Huawei P Smart de 32 GB en color Dorado y liberado, cuesta en argentina $13.999 (con un descuento del 20% de su precio habitual) y con la tarjeta de la casa de electrodomésticos puede encontrarse en oferta en $11.999, el mismo modelo también está en el país vecino y se vende por 189.990 pesos chilenos lo que equivale a $11.757 aproximadamente.