Entre la inseguridad potenciada por los crímenes vinculados al narcotráfico y las pintadas que sorprendieron en Rosario, este martes el gobernador de Santa Fe le aceptó la renuncia a su ministro de Seguridad y ya decidió su reemplazo.

Jorge Lagna fue el funcionario que no pudo detener la ola de violencia, principalmente, en la ciudad puerto, por lo que este miércoles asumirá en ese cargo al comisario general Rubén Rimoldi.

Este miércoles, Rosario apareció con pintadas en diversos edificios públicos, incluida la sede local de la Gobernación santafesina, con referencias a la violencia criminal y al humo por la quema en las islas del delta. Fue la gota que rebasó el vaso y obligó al mandatario justicialista a pedirle la dimisión al ministro.

Lagna había asumido en marzo, luego de que también saliera eyectado del gobierno santafesino Marcelo Saín. Desde la gobernación no dieron a conocer las causas de la salida del funcionario peronista.

En la misma acción, también se va la jefa de la Policía provincial, Emilse Chimenti.

Lagna deja el cargo en medio de una crisis de seguridad pública con el número más alto de homicidios en lo que va del año en Rosario en comparación con la última década.

En la tarde de este martes, fue asesinado un joven de 20 años durante una balacera en la que una mujer y un niño de 13 resultaron heridos, una semana después del asesinato de otro chico de la misma edad.

Rimoldi es un comisario retirado que fue jefe de la Unidad Regional del departamento Caseros. Además, fue subsecretario de Seguridad Ciudadana en la ciudad santafesina de Casilda, ubicada a 50 kilómetros de Rosario sobre la Ruta Nacional 33.

También está confirmado quién será el jefe de la Policía provincial: se trata del comisario general Miguel Ángel Oliva.

Fuente: El Sol