El control pleno en áreas estratégicas para poner en marcha su plan, sin interferencias, fue la demanda de mayor peso de Sergio Massa a sus socios de la alianza gobernante para desembarcar como el hombre fuerte del Gabinete nacional. Hubo algunos contratiempos que puso en pausa las primeras medidas de la gestión del superministro, pero anoche logro hacerse del control de un área sensible por los subsidios y que se resistía a cambiar de manos: la Secretaría de Energía, que hasta ahora era comandada por un hombre que impulsó el exministro, Matías Kulfas, y otro de paladar negro del kirchnersimo que responde directamente a Cristina Kirchner. Pero después de varias idas y vueltas y silencio de radio, finalmente fueron eyectados del Gobierno.
Se trata del secretario de Energía, Darío Martínez, y su número dos, el subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo, el funcionario que en vano había intentado sacar de su camino el exministro de Economía, Martín Guzmán. Tanta pelea y falta de acuerdo con los funcionarios de esta área sensible -maneja los multimillonarios fondos para comprar energía y subsidiar el consumo- terminó con la intempestiva renuncia de Guzmán que disparó la actual crisis que catapultó a Massa y lo empoderó ya que está concentrando en sus manos el poder de áreas claves.
Para conducir la Secretaría de Energía, Massa eligió a Flavia Royón, quien hasta ahora era ministra de Energía y Minería del gobierno de Gustavo Sáenz en Salta, un aliado del tigrense.
Royón estará acompañada por "Santiago Yanotti como subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Bernal como subsecretario de Hidrocarburos y Cecilia Garibotti como subsecretaria de Planificación", escribió el propio Sergio Massa en su cuenta de Twitter confirmando los cambios en la cúpula de la Secretaría de Energía. Además, el superministro agradeció "el trabajo de Darío Martínez, Federico Basualdo y del equipo que hasta acá llevó adelante la tarea en Energía".
"El objetivo de todos debe ser nuestra soberanía energética y la transformación de Argentina como potencia en este sector", indicó.
La reformulación de la política energética -con una mayor quita de subsidios a las tarifas que la anunciada previamente- indicaba que Sergio Massa tenía intenciones de avanzar en la Secretaría de Energía.
Martínez había llegado al cargo en agosto del 2020, en reemplazo de Sergio Lanziani y bajo la órbita de
Kulfas, que tampoco pudo domar el peso camporista en ese sector clave. Además, de la compra de energía -electricidad, gas y petróleo- y los subsidios al consumo, la Secretaría de Energía tiene bajo su órbita la construcción del gasoducto Néstor Kirchner, una obra que definirá, en un futuro no muy lejano, la independencia energética de Argentina que gasta alrededor de 15.000 millones de dólares anuales en la compra de energía.
El camporista Basualdo, por su parte, había sido el desaire principal para Guzmán, quien pidió su eyección y se topó con la resistencia de la vicepresidenta.
Por todo este antecedente, con La Cámpora resistiendo, es que habían dudas sobre si finalmente Massa podría tomar todo el control del área energética del país. Pero ahora tiene luz verde para avanzar en el recorte de subsidios. Ahora habrá que esperar, en principio hasta el jueves, para conocer la letra chica y el alcance de la quita.
La despedida
Una vez confirmada su salida de Energía, el neuquino Darío Martínez escribió en sus redes sociales "estoy eternamente agradecido con el presidente, Alberto Fernández, y la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, por haberme convocado para ejercer el cargo de secretario de Energía de la Nación".