Con un claro discurso que ratificó su pertenencia al kirchnerismo, el gobernador bonaerense Daniel Scioli, se mostró ayer con plenitud en su nuevo rol de principal armador político del oficialismo, al tiempo que bajó líneas de cómo debería continuar la gestión de CFK para asegurar la continuidad en 2015.
En este sentido, dijo que tiene puesto “todo” su “empeño en acompañar” a la presidenta Cristina Fernández porque “este Gobierno tiene que terminar lo mejor posible” e insistió en garantizar la gobernabilidad con “diálogo entre todos los sectores” políticos y económicos del país.
Al hablar en la conferencia anual del Consejo de las Américas, que se desarrolló en el Hotel Alvear en el barrio porteño de Retiro, Scioli sostuvo: “En este momento pongo todo mi empeño en acompañar a la Presidenta porque este Gobierno tiene que terminar lo mejor posible para que luego la dinámica pueda llevar a las Argentina a un mejor futuro”. Además, el mandatario afirmó que “cuando alguien gobierna tiene que actuar con un gran sentido del deber y la responsabilidad” y reclamó que todos los sectores “ayuden a que los que gobiernan lo puedan hacer lo mejor posible”.
A continuación, Scioli valoró la ‘estabilidad económica y social‘ lograda con la implementación del modelo impulsado desde el 2003, no obstante lo cual remarcó que existen ‘asignaturas pendientes‘. ‘Hoy podemos repensar la Argentina con mirada de mediano y largo plazo, cuidando el proyecto pero haciendo los cambios que haya que hacer, corregir lo que haya que corregir y terminar con la etapa de la Argentina pendular. Tenemos que buscar inteligentemente, sobre las coincidencias, cómo seguimos encarando el futuro‘, sostuvo Scioli en el marco de un panel que compartió con sus pares de Chaco, Jorge Capitanich, y de Santa Fe, Antonio Bonfatti.
Otra de las frases que tronaron fuerte en el auditorio fue cuando consideró que “en el país no está todo mal, pero tampoco todo bien” y sostuvo que la Presidenta “tiene la responsabilidad de hacer y no de prometer”. “Es de una gran irresponsabilidad hablar de transición. Hay que esperar hasta 2015 que llegue un nuevo Gobierno porque esas ideas parten de sectores que quieren generar incertidumbre y mostrar al Gobierno débil y poco sólido”.

