Antecedente. Antes de ser juez de Esquel, Otranto fue secretario de la Cámara Federal, uno de los tribunales de Comodoro Py por donde pasan las causas contra funcionarios públicos.

 

El juez federal de la ciudad chubutense de Esquel, Guido Otranto, a cargo de la causa por la desaparición de Santiago Maldonado, señaló que es importante para el futuro de la investigación tener las pruebas de ADN de los gendarmes que participaron del desalojo de la ruta el 1 de agosto, fecha en la que desapareció el joven artesano.

Al hablar ayer por primera vez con periodistas, el magistrado aseguró que esta semana estarán los resultados de distintas pruebas de ADN que podrían aportar alguna certeza. Otranto hizo declaraciones tras reunirse ayer con el secretario de Seguridad Interior de la Nación, Gerardo Milman, quién a las 15 le entregó documentos que contienen "información relevante" para la causa.

"Esta semana deberían estar los resultados de las pruebas de ADN de la ropa que nos aportaron y de todo lo que se encontró en las camionetas (de la Gendarmería)", sostuvo Otranto, quien agregó que la dificultad para obtener estos resultados estuvo dada en "la cantidad de muestras biológicas que se tomaron".

Sobre la posibilidad de tomar declaración a los gendarmes, el juez aclaró que "en esta causa aún no han declarado, ya que para definir en qué situación van a presentarse a declarar, se necesita tener el resultado de las pruebas de ADN".

El magistrado además aclaró que los gendarmes sí declararon en la causa que refiere al corte de ruta del 1 de agosto, que fue justamente cuando se vio a Maldonado por última vez en Chubut durante la protesta que concluyó con la actuación de la Gendarmería.

Con relación a los rastrillajes en la zona, Otranto adelantó que "van a continuar" hoy y aclaró que le pidió a Milman "reforzar la cantidad de personal para hacerlo". "Los rastrillajes serán río abajo", sostuvo, al enfatizar que "no fue por una cuestión de respeto a la "Tierra Sagrada" que no se ingresó a rastrillar la zona en los primeros días, sino porque no había posibilidad de imponerse físicamente". "El primer rastrillaje, el que se hizo el día 5, fui yo solo con personal del juzgado en mi auto y me tuve que ir porque se puso áspero. (Los mapuches) estaban enojados por la orden de desalojar la ruta, y tuvimos que retirarnos", confió. "Después de eso quedó un policía con un perro de custodia, con lo cuál era imposible entrar al territorio si ellos se oponían, porque nos superaban físicamente", agregó. Horas antes, desde Esquel, ciudad a la que llegó ayer para entregar documentación al juez, Milman dijo: "Le vamos a entregar información relevante". Milman viajó junto al secretario de Cooperación con el Poder Judicial, Gonzalo Cané, y precisó que la documentación contiene "fotos y testimonios relevantes". El juez investiga la desaparición de Maldonado el 1 de agosto, en el marco de un operativo de Gendarmería en Cushamen, Chubut. El juez ordenó el viernes un rastrillaje en las márgenes del río Chubut. Télam