Santa Cruz.- Durante los allanamientos realizados por la Justicia en Santa Cruz, los investigadores descubrieron un elemento que les llamó la atención. Se trata de una estatua de bronce de Néstor Kirchner, que estaba en una de las propiedades del empresario Lázaro Báez.
La Policía Federal dio con la obra de 1.80 metros cuando allanó el galpón en el guardaba su ‘flota negra’ de autos de lujo. Se cree que costó 500 mil pesos.
La estatua terminó archivada entre los Audis, Porsche y otros autos de colección del empresario, que permanece detenido en el penal de Ezeiza.
Tanto el hecho que generó la creación de la réplica en tamaño real del expresidente como el motivo por el que terminó entre los vehículos de Báez todavía es un misterio.
