El intento de asesinato de Cristina Kirchner encendió todas las alarmas en el kirchnerismo que puso bajo la lupa al ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, por la falla del operativo que custodia a la Vicepresidenta. Presionado, Aníbal llegó a ofrecer su renuncia al Presidente. Pero el malestar por cómo se viene desarrollando la investigación, escaló y volvió a dividir aguas en el Frente de Todos. Ayer la polémica tomó un camino insospechado tras la publicación de un enigmático tuit por parte del abogado defensor de Cristina, Gregorio Dalbón: “Mi olfato me dice que el enemigo es tropa propia”, fue la oración final de un posteo en redes sociales de uno de los abogados que defiende a la Vicepresidenta.
Lo publicó la noche del viernes y debido al revuelo que provocó decidió borrarlo. Ayer por la mañana Dalbón hizo una aclaración, con la que buscó descartar las sospechas que generó pero en vez de aplacar la polémica le echó más leña al fuego porque en su descargo pereció apuntar contra la oposición.
“Hay muchas cosas que no cierran. Salvo Diego Carbone en quien confío (jefe de la custodia de CFK) hay mucho hilo para tirar. Y cuando Cristina Kirchner lo desee vamos a tirar a juicio a todos los autores materiales, intelectuales, cómplices y encubridores. Mi olfato me dice que el enemigo es tropa propia”, decía el mensaje que publicó pasadas las 22.
De esa manera, el defensor de CFK sembró más incertidumbre sobre el atentado que padeció Cristina Kirchner el jueves 1 de septiembre y del que la Justicia tiene varios videos incriminatorios contra Fernando Sabag Montiel y también contra su novia, Brenda Uliarte, que se hacía llamar “Ámbar”.
Hasta ayer, cuando la captura del mensaje borrado circulaba en las redes sociales, Dalbón ensayó una aclaración sobre la frase “El enemigo es tropa propia”: “Propio me referí al borrado del celular no inventen donde no hay. El atentado está claro que viene de la vereda de enfrente premeditado y preparado”. Sin embargo, apuntó al peritaje del celular que tenía Sabag Montiel que hizo la Policía Federal, que también depende de Aníbal Fernández. “Pero el “error” del celular en mi opinión personal no cierra. ¿Quién lo peritó la banda de los copitos?”, afirmó ayer en un intento por despejar dudas.
Las miradas en Twitter, y los comentarios por el tuit de Dalbón, giraron enseguida a imaginar que la hipotética alusión tal vez apuntaba a Aníbal Fernández, sobre todo porque hubo otro retuiteo llamativo del abogado de Cristina, justamente a una nota de Perfil.com en la que se citaban las declaraciones del ministro de Seguridad, negando que se hayan producido errores en el operativo de la Policía Federal en torno a CFK la noche en que Fernando Sabag Montiel gatilló una pistola a pocos centímetros de la exmandataria.
A ese título de Perfil, repitiendo palabras de Aníbal Fernández (“En el operativo no falló nada”), Dalbón replicó con una sola palabra, simple y de enorme significancia: “¿No?”. Al preguntarse eso, ponía de manera implícita en duda la respuesta de ministro de Seguridad, y esa respuesta, anudada al mensaje que luego borró, fue la que se comentaba en redes, con muchas de las reacciones que insistían en pedirle al reconocido letrado “más data Gregorio, por favor”.
De Pedro y Di Tullio, más leña al fuego
El ministro del Interior y referente de La Cámpora, Eduardo “Wado” de Pedro, ironizó ayer ante una pregunta sobre el operativo de seguridad que montó Aníbal Fernández en torno a Cristina: “Para analizar si el operativo falló o no, el único que tiene la información es él. Con lo cual, si dice que no falló, no falló. El operativo lo planificó él”. En sintonía, la senadora del FdT Juliana Di Tullio disparó contra el operativo: “No alcanzó, es objetivo lo que estoy diciendo”. Y pidió reforzar los alrededores.
- Investigan vínculos entre los “copitos” y Revolución Federal
En la causa por el atentado fallido contra Cristina Kirchner las pesquisas de la Justicia apuntan por estas horas a establecer si el grupo de los “copitos” de Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte tiene algún vínculo con “Revolución federal”, el grupo radicalizado y antikirchnerista.
Se trata del grupo que realizó escraches arrojando antorchas frente a la Casa Rosada y buscó esta semana despegarse de los detenidos por el intento de homicidio de la Vicepresidenta.
El grupo profesa un “antikirchnerismo” radicalizado que se organiza por chat y se expresa en las redes sociales como una oposición al Gobierno de acción directa.
“Los vamos a perseguir, van a tener miedo de salir a la calle. El robo y la corrupción en Argentina va a dejar de ser gratis, por las buenas o por las malas”, decía el grupo en la plataforma Instagram el 19 de agosto último, un día después de arrojar antorchas sobre la Rosada por arriba de la reja perimetral de la calle Balcarce.
En su momento, la “acción” del colectivo pasó desapercibida pero luego ganó centralidad cuando detectaron que Brenda Uliarte, junto a su novio, estuvo en la noche de las antorchas.
La prueba la aportó la misma Uliarte, en una foto que subió a su perfil de Instagram, en la que se la ve vestida con buzo y pantalón rayado, con la Casa de Gobierno y un cordón policial a sus espaldas.
Ahora la justicia investiga si miembros de “Revolución Federal” estuvieron en las inmediaciones de la casa de CFK, incluso si se vincularon con el grupo de Sabag Montiel. El principal indicio de la presencia de “Revolución Federal” es la foto que tomó el 28 de agosto el tesorero del grupo, Leonardo Sosa, desde la ventana del departamento de la vecina de la vicepresidenta y que luego subió a Twitter.