Eclipse de sol viste desde Río Gallegos. 26 de Febrero de 2017

 

El eclipse anular de sol que se produjo esta mañana y pudo ser visto especialmente en el sur del país fue seguido con curiosidad en distintas provincias por grupos de personas que se acercaron a los observatorios astronómicos para poder ver el fenómeno con telescopios, lentes especiales o por la transmisión de televisión e internet.  

 

Decenas de personas se acercaron a primera hora de hoy a los observatorios del Planetario porteño, del Parque Centenario, el de Córdoba o Villa Mercedes, en San Luis, para seguir las instrucciones de los expertos para que la experiencia no dañe la vista.   Asimismo, algunos más prácticos enseñaron a quienes no tenían aparatos especiales para visualizar el paso de la luna por delante del Sol que podían lograr un efecto visual haciendo un agujero en una hoja de papel que dio como resultado el reflejo de un medialuna proyectada como sombra en el piso.  

 

Este eclipse anular de sol pudo observarse en el hemisferio sur, especialmente en Argentina y Chile, no volverá a repetirse hasta dentro de 30 años, de acuerdo a lo informado por los científicos que tomaron cientos de fotografías para documentar el fenómeno.   En Chubut, más de un centenar de especialistas se congregó en los últimos días en distintas localidades, en especial costeras para poder seguir la experiencia inusual y participaron de distintos congresos y debates sobre la temática.  

 

Durante este eclipse, la luna llegó a cubrir cerca del 70 por ciento del solar y si bien la observación fue parcial desde diversas ciudades en varias localidades los ciudadanos reportaron que percibieron también un descenso de temperatura durante algunos minutos, en una mañana donde la sensación térmica superaba los 34 grados.   De acuerdo a los datos astronómicos, el inicio de la parcialidad se dio a partir de las 9:30 de hoy, mientras el máximo se produjo alrededor de las 10:50, cuando se pudo ver como la luna tapaba gran parte de la luz del Sol.  

 

El eclipse continuaba hasta pasado el mediodía aunque por entonces el efecto ya no era visible para el ojo humano.   Varias familias se mostraron entusiasmadas por el fenómeno que pudieron observar con ayuda de telescopios o lentes especiales y coincidieron en calificar de ‘única‘ e ‘inolvidable‘ a la experiencia.