El Gobierno nacional amplió levemente ayer el cupo de de argentinos y residentes que podrán ingresar al país por vía aérea, de acuerdo con un esquema gradual que regirá durante las próximas cuatro semanas que abarcará la nueva etapa de restricciones por coronavirus.
De los actuales 600 cupos habilitados por día, o 4.200 por semana se pasará a 5.200 plazas disponibles para la semana del 10 al 16 de julio. Es decir, 1.000 personas más por semana o 142 por día. Este cupo pasará a 6.300 plazas disponibles en la semana que va del del 17 al 23 de julio. Finalmente el cupo subirá a 7.000 para las semanas del 24 al 30 de este mes y la del 31 de julio al 6 de agosto. También se permitirá el ingreso desde Uruguay de dos buques de pasajeros semanales, con aforo de hasta el 50%.
Ante la necesidad de evitar la entrada de variantes de coronavirus que no tienen circulación comunitaria en el país, como la Delta, el Gobierno recomendó "no viajar al exterior, especialmente a aquellos que integran los grupos de riesgo". Además, se agregó, que seguirán suspendidos los vuelos provenientes de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Chile, Brasil, India y países africanos.
También continúan suspendidos los viajes internacionales grupales, de egresados y egresadas, jubilados y jubiladas, de estudio, para competencias deportivas no oficiales; de grupos turísticos y de actividades recreativas y sociales, en forma genérica.
Quienes regresen desde el exterior estarán obligados a aislarse en los lugares que determinen los gobiernos provinciales y de la Ciudad de Buenos Aires durante 10 días, contados desde el testeo realizado en el país de origen; y la estadía en los lugares de aislamiento estarán a cargo del pasajero.
Los viajeros deberán hacerse un testeo para poder abordar el avión con destino a la Argentina y, además, deberán hacerse una prueba al llegar al país y otra al séptimo día de ingreso.
Quienes resulten negativos, al ingreso al país deberán cumplir con el aislamiento en los lugares que dispongan los gobiernos provinciales y de CABA y deberán realizar un nuevo test para finalizarlo.
Quienes resulten positivos, al ingreso al país deberán realizar otro testeo de secuenciación genómica y, junto con sus contactos estrechos, cumplir aislamiento en los lugares que indiquen las autoridades nacionales, hasta su traslado seguro hasta la residencia si correspondiera.
- Para transportistas
En cuanto a transportistas y tripulaciones terrestres, los extranjeros y nacionales deberán contar con testeo de covid negativo que tendrá una vigencia de siete días. Estos testeos deberán realizarse previo a comenzar el viaje, en cercanía a su lugar de residencia. En el casos de los buques, los extranjeros deberán permanecer embarcados y no contarán con relevo en el país; los nacionales tendrán que realizar un testeo de antígenos dentro de las 72 horas de ingreso. Transportistas internacionales y operadores turísticos deberán informar a los usuarios las restricciones vigentes, las condiciones fijadas por cada jurisdicción en la que resida el viajante y la posibilidad de que las mismas sean modificadas según la situación epidemiológica. Los extranjeros no residentes que ingresen a desarrollar trabajos esenciales, con autorización de Migraciones, deberán cumplir la cuarentena.
Bajo riesgo penal
Se controlará que quienes regresen cumplan con el aislamiento en sus domicilios y se radicarán denuncias penales en caso de verificarse que no lo hagan, de acuerdo con los art. 205 y 239 del Código Penal, por violación a medidas contra epidemias y desobediencia a autoridad pública.