En la mira. Triaca (derecha) y Peña (centro) le vienen apuntando a la expresidenta Fernández de Kirchner, en estos días de paros y protestas.

 

El Gobierno nacional de Mauricio Macri volvió ayer a acusar directamente a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, dijo ayer que Cristina Fernández de Kirchner y dirigentes sindicales tienen una ‘vocación desestabilizante’. De todos modos, reafirmó la ‘vocación de diálogo’ que el Gobierno mantiene hacia la Confederación General del Trabajo (CGT), pese al anuncio de un paro general para el próximo 6 de abril contra la política económica de la administración de Mauricio Macri.

El miércoles pasado, en medio de protestas sociales y el paro docente, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, consideró que ‘hay sectores que necesitan que fracase el cambio, empezando por Cristina Fernández de Kirchner‘.

‘Sin duda, hay una manifestación política en estos reclamos. Hay un conjunto de dirigentes que tienen una vocación desestabilizante desembozada, sin pruritos’, dijo Triaca ayer a radio La Red. En ese marco, señaló que, entre esos dirigentes, se encuentran ‘desde la expresidenta (Fernández de Kirchner) para abajo, como también dirigentes gremiales que la acompañaban’, aunque no quiso identificarlos. No obstante, destacó que esa situación ‘no involucra al conjunto de los dirigentes’ y remarcó la ‘actitud constructiva’ mantenida por el movimiento sindical durante el año pasado.

El ministro dijo que, con la CGT, ‘el diagnóstico no lo compartimos’, con lo cual ‘se hace difícil encontrar puntos de acuerdo’. No obstante, reafirmó la ‘vocación de diálogo y de resolver los problemas’ del Gobierno nacional y ratificó el interés por encarar una ‘agenda común’ con los gremialistas.

‘El diagnóstico no lo compartimos. Vemos una economía que empieza a recuperar empleo, que empieza a bajar el nivel de inflación. Son noticias claramente positivas en las cuales hemos trabajado en conjunto con sectores sindicales y empresarios’, indicó el titular de la cartera laboral. Para el dirigente de la CGT, Juan Carlos Schmid, ‘el paro del 6 de abril va a ser de un grado de adhesión muy alto‘ porque ‘el gobierno ha gastado el 30 por ciento de su mandato y los cambios no aparecen‘. Télam y DyN