El Gobierno y cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA) pusieron ayer paños fríos a la creciente tensión de los últimos días en un encuentro en la Casa Rosada en la que acordaron apostar al diálogo para para “avanzar en los desafíos”, mejorar la competitividad y generar empleo. Sin embargo, los ministros de Mauricio Macri, fueron contundentes al cerrarle el paso a uno de los reclamos más reiterados de los empresarios: Advirtieron que el Gobierno mantendrá el actual esquema de apertura de las importaciones que a entender de los empresarios es uno de los principales factores que “golpean” a la industria nacional.
En la reunión participaron, por parte del Ejecutivo, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, y por la UIA su presidente, Miguel Acevedo y los vicepresidentes Luis Betnaza y Daniel Funes de Rioja.
El Gobierno se comprometió a “canalizar los reclamos” que los empresarios pusieron sobre la mesa, pero mantuvo su postura de no acceder al pedido de limitar las importaciones. Más: el ministro Cabrera defendió la estrategia del Gobierno de abrir las importaciones: “La mayoría de las importaciones tiene que ver con el ciclo productivo, más del 80%. Es decir, son importaciones que hacen bien a la industria”, dijo, al cabo de la reunión.
Cabrera señaló que “el problema del comercio internacional en la Argentina está mucho más focalizado en la falta de exportaciones que tenemos que en las importaciones”, sobre las que dijo que están por “debajo de años anteriores”.
La reunión, que encabezó Peña en su despacho, se prolongó durante una hora y cuarto.
“Fue una charla larga, franca y abierta. Hubo muchas coincidencias para trabajar juntos, para mirar hacia el futuro. La verdad es que no había un problema. La idea es profundizar los acuerdos sectoriales”, amplió Cabrera, al precisar que el trabajo continuará en las mesas sectoriales, “ya constituidas”: de Metalmecánica; Alimentos; Servicios basados en conocimiento; Comercio y Logística; Foresto Industrial; Maquinaria Agrícola (se lanzó la semana pasada) y la de Energías Renovables y Vaca Muerta.
Acevedo, en tanto, sostuvo que el encuentro fue “mucho más largo” de lo que él esperaba, y consignó que acordaron trabajar “más en conjunto con el Gobierno” para atender tanto las cuestiones de “largo plazo” como la “coyuntura”.También aseguró que han “encontrado un enorme acompañamiento” de la administración nacional para “salir a competir en el exterior” y “ganar mercados que la Argentina tenía, que se han cerrado y hay que volver a recuperar”, aunque aclaró que eso no se logra de “un año para otro” porque “lleva tiempo”.
Según explicó la UIA, en la reunión se analizó el conjunto de medidas “positivas” que el Gobierno impulsó desde el inicio de su gestión, así como aquellas cuestiones en las que aún es necesario trabajar -como la Ley de “Financiamiento Productivo” y el régimen de “Compre Argentino y Desarrollo de Proveedores Nacionales”-.
A los empresarios no les hizo ruido que, finalmente, Macri no pasara a saludar, ya que a esa hora recibió a su par de Croacia Kolinda Grabar-Kitarovic. Igual, Cabrera aclaró que minutos antes se comunicó con él y le “ratificó su compromiso con la industria y pidió participar de algunas de las mesas” de trabajo que se van a constituir. “Fue una reunión técnica”, lo justificó, también, Acevedo.
Aclaran que no pidieron inversiones
Marcos Peña planteó que si sólo hablaban de lo que estaba “mal”, no se veía todo lo que se estaba haciendo y eso hacía todo más difícil”. Los empresarios respondieron que “muchas veces” hablaban “de las cosas buenas”, pero que lógicamente no tenían el mismo impacto mediático. “Siempre salen (publicadas) las cosas pendientes”, explicaron. La explicación convenció al Gobierno. Así, al enfrentar los micrófonos, Cabrera se mostró conciliador y buscó despejar dudas respecto a la posición del Gobierno. “Nosotros nunca pedimos inversiones, nunca le exigiríamos a nadie que hiciera una inversión, porque entendemos que la inversión la tiene que hacer un empresario que está convencido que va a tener una rentabilidad”, explicó.