El propio jefe de Gabinete había anticipado en una entrevista publicada el sábado que el Gobierno iba a gravar con un nuevo impuesto los viajes y consumos en el exterior. Dijo que sería un gravamen de alrededor de un 20% sobre el valor del dólar. Pero ayer, el jefe de ministros, Santiago Cafiero, confirmó que finalmente el dólar turista pagará un recargo del 30%.
La medida se oficializará en las próximas horas y se aplicará tanto a las compras realizadas fuera del país como a las que se realizan desde la Argentina pero en moneda extranjera, lo que incluye plataformas de comercio electrónico, servicios de streaming o aplicaciones como es el caso de Netflix o Spotify.
Y el argumento para esta y otras medidas ya anunciadas, y las que vendrán, fue: "Una lógica solidaria y contributiva".
"El impuesto a las compras en el extranjero es del 30%. Tiene una lógica solidaria y contributiva. Los argentinos que tengan la posibilidad de viajar al extranjero y hacer sus compras con las tarjetas, esas compras después se pagan con dólares del Banco Central. Esos dólares los tenemos que cuidar mucho", justificó.
"No ponemos ninguna restricción para los que puedan viajar, lo hagan y disfruten. Necesitamos recaudar de alguna manera esa diferencia entre el gasto de tarjeta de crédito y después se paga en pesos aquí y los dólares terminan saliendo del Banco Central", argumentó Cafiero. Y, además, rescató que la medida tendrá un impacto positivo en el turismo local, que genera empleo.
También aclaró que el recargo del 30% será para todos los consumos que tengan un valor fijado en dólares, más allá de que ser realicen dentro o fuera del país y que en el resumen de la tarjeta de crédito aparezcan convertidos en pesos. Lo que incluye a servicios online o compras en sitios de comercio electrónico.
Con este precio especial, el "dólar turista" pasaría a valer aproximadamente $81,90 contra los $63 del cierre del dólar del viernes pasado. Este valor encarecerá la compra de pasajes al exterior y también el uso de la tarjeta fuera de la Argentina. Desde el sector financiero, advierten que la medida podría tener como consecuencia no deseada una suba en el dólar libre, cuyo último valor se estimaba en menos de $67, con lo que quedaría por debajo del dólar más el recargo del 30% y motivaría a muchos viajeros a abastecerse de dólares en el mercado informal antes de viajar fuera del país.