Buenos Aires, 21 de agosto.- El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, confirmó hoy el relevo de la cúpula de la Gendarmería Nacional y lo vinculó al malestar generado por la represión con balas de goma contra colectiveros de la línea 60 que realizaban un piquete sobre la autopista Panamericana, a fines de julio último. La información había sido anticipada en exclusiva por LA NACION.
"Hasta donde yo conozco, el tema de Gendarmería refiere específicamente a la última situación, por la línea 60, pero no sé más que ese dato; es esa discusión de que hubo actos represivos", señaló Fernández, consultado sobre la decisión de relevar al director nacional de Gendarmería, Enrique Zach, y al subjefe, el comandante general José Pereyra.
El funcionario, como es habitual, formuló declaraciones esta mañana, al ingresar a la Casa de Gobierno, en donde abordó la decisión de relevar a Zach y Pereyra, jefes de la fuerza que reúne a unos 60 mil miembros.
