La tan promocionada suma fija de $60 mil para trabajadores registrados nació desinflada porque sólo implicaba un adelanto de sueldo deducible de paritarias. Pero el anuncio que hizo el domingo el ministro de Economía, Sergio Massa, quedó en medio de una tormenta y amenaza con naufragar a medida que pasan las horas. Ayer, doce provincias informaron que "no van a pagar" la suma fija, unas porque "no tienen fondos para hacerlo" y otras porque prefieren ceñirse a los acuerdos paritarios ya acordados con los distintos gremios. Y como si esto fuera poco, ante el rechazo de muchas empresas de abonar esta mejora, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, adelantó ayer que los privados que no paguen la suma fija sufrirán severas multas por parte de la cartera laboral. Además, confirmó que los trabajadores que reciban la suma fija por parte del Estado o por parte de empresas asistidas por el Estado (micro y medianas empresas) no podrán comprar dólares en el mercado oficial donde los ciudadanos tienen disponibles 200 dólares mensuales.
La resistencia de las provincias a pagar la suma fija supone un duro golpe político para Sergio Massa ya que baja considerablemente el impacto del nuevo plan platita con el que el candidato presidencial de Unión por la Patria abrazará como eje central de la campaña que pondrá en marcha la semana que viene de cara a las elecciones generales del 22 de octubre.
Lo concreto hasta ahora es que las provincias de Misiones, Santa Fe, Jujuy, Córdoba, La Pampa, Entre Ríos, Neuquén, Catamarca, Tucumán, Salta, Santa Cruz y la ciudad de Buenos Aires ya anunciaron que no abonarán la suma fija de $60.000 propuesta por Massa. Desde los distintos distritos aclararon que decidieron mantener acuerdos salariales establecidos en sus respectivas paritarias, y que eran previos al anuncio del Gobierno Nacional. Algunas destacan que las paritarias en los distritos supera entre 15 y 16 por ciento la inflación o que ya otorgaron bonos incluso superiores a los $60 mil.
La cosa es que Massa invitó a las provincias y municipios a "adherir" al pago de esta suma fija ya que deben hacerlo con fondos propios. El Gobierno confirmó que no habrá partidas específicas de la Nación para asistirlas con este gasto.
En el caso de Córdoba confirmaron que "se asume que la suma fija está incluida dentro de los aumentos salariales ya otorgados" en el marco de la paritaria provincial, por el cual los trabajadores que menos cobrarán accederán en septiembre a un aumento de $33.000, superior a la suma fija que dispuso la Nación.
En Catamarca tampoco pagarán porque tienen activo un bono de $120.000 a pagar en 6 cuotas que fue anunciado en mayo, al que además se le añadieron otras dos cuotas extra de $20.000 cada una antes de fin de año.
Otra que no adherirá es Santa Cruz. La gobernación en manos de Alicia Kirchner dispuso el 15 de julio pasado, tanto para el personal activo como el pasivo de los tres poderes provinciales, el pago de un "Bono Extraordinario" de $100.000 para quienes ganan un salario bruto inferior a $300 mil, y de $60.000, para quienes superan ese ingreso.
En el caso de Jujuy, el gobernador Gerardo Morales informó que la provincia "no cuenta con recursos para hacer frente al pago de un bono" ya que dichos fondos están comprometidos al pago de la paritaria vigente.
> Sólo si ganan hasta $370.000
Para recibir la suma fija de $60 mil los trabajadores deberán cobrar menos de $400.000 neto al mes en agosto. De esta forma, según ejemplificó la ministra Kelly Olmos, los que ganen hasta $370.000 recibirán el bono completo. Aquellos que reciban más pero no superen el tope recibirán un proporcional.
Al ser consultada sobre cómo se calculan ese ingreso de $400.000, Olmos señaló: "Son netos, incluyendo todos los adicionales". Es decir, que los gastos como guardería o teletrabajo se incluyen a la hora de hacer el cálculo. Si el adicional lo pone por encima de los $400.000, ese empleado no recibirá el bono.