En la últimas horas trascendió que, el decreto de necesidad y urgencia (DNU) que el presidente Alberto Fernández publicaría en el Boletín Oficial sobre las nuevas restricciones nocturnas debido a la pandemia por coronavirus, actuará como una "recomendación" que establecerá un marco general, según indicó el diario La Nación. A la vez se agrega que, será cada gobernador el que defina cómo se implementará en cada distrito.

Cabe recordar que, en San Juan, las autoridades del Gobierno afirmaron que esperan conocer en detalle el DNU para tomar decisiones, aunque ya aseguraron que las restricciones serán más flexibles, con menos horas de prohibiciones, libre circulación de micros y sin tocar las reuniones familiares.

Sumado a eso, pese a que desde el gobierno nacional hablaron de un consenso con los mandatarios provinciales, tres distritos anticiparon que no acatarán la disposición: la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, que, con distintos matices, anunciaron que no aplicarán la restricción de la circulación desde las 23 a 6, horario que confirmó el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, tras reunirse ayer por la tarde con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro del Interior, Eduardo De Pedro.

La definición del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, además, abrió interrogantes sobre cómo se aplicará la norma, que establecerá sanciones para aquellos que circulen después de las 23, en el Área Metropolitana, que integran la Ciudad y los 24 municipios que la rodean.

El decreto, que saldría publicado en el Boletín Oficial, no hablará de toque de queda, como se especuló en los últimos días. En esto trabajaron durante gran parte del día el Presidente, Cafiero; la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti.

El objetivo de la restricción es bajar el número de contagios -que por tercer día consecutivo superaron los 13.000 nuevos enfermos- y establecer un mensaje uniforme de que, debido al relajamiento social, la situación es "preocupante". La decisión de atemperar la redacción de la norma estuvo fundada en las diferentes realidades que atraviesan las provincias.

El decreto, que tendría una extensión de 14 días, también bajará la frecuencia de los vuelos al exterior -bajará entre un 30 y un 40 por ciento- y a los turistas internos se les exigirá la presentación de un test PCR al llegar a destino por la vía área. Además, se acotará a 10 el número de personas en reuniones y el transporte público será de uso exclusivo de los trabajadores esenciales.

Si bien creció la preocupación en Balcarce 50, el Presidente busca evitar la parálisis de la economía, como sucedió el último año, y tampoco quiere entorpecer la temporada de verano, algo que reclamaron algunos jefes comunales como Guillermo Montenegro (Mar del Plata) y Martín Yeza (Pinamar).

Fuente: La Nación