Jorge Albarracini, padre del seguidor de la secta cristiana Testigos de Jehová que está internado con balas en su cerebro y piernas, se manifestó ayer ‘decepcionado‘ por el fallo de la Corte Suprema que avaló la decisión del paciente de no recibir transfusión de sangre por sus creencias religiosas. ‘Pablo está deteriorándose, con un peso muy bajo. Sigue atado a la cama y cada vez que se despierta está con una mirada desesperada‘, sostuvo Albarracini. Respecto del fallo que emitió por la Corte, sostuvo que la justicia ‘se maneja como los Testigos de Jehová‘. ‘Los testigos no van a cambiar su postura, porque con su idea de la vida eterna no les importa la vida en la tierra‘, añadió.