La expresidenta Cristina Kirchner sumó ayer el octavo procesamiento en su contra, el tercero con pedido de detención, por presunta corrupción, aunque seguirá sin hacerse efectiva por ser senadora y tener fueros.
Esta vez, el juez federal Claudio Banadio abrió un proceso penal, que se vincula a la conocida como ‘causa de los cuadernos‘, contra la exmandataria por la importación con presuntos sobreprecios de buques con gas natural licuado (GNL) durante su mandato presidencial.
Otros siete procesamientos más pesan ya sobre CFK que insiste en que es víctima de una persecución judicial hilvanada por el actual Gobierno y ya el pasado 25 de febrero declaró por escrito que ‘no existe un solo elemento de prueba‘ que la vincule ‘siquiera remotamente‘ con lo que se la acusa.
En el dictamen de Bonadio, que también procesó a, entre otros, exdirectivos de las estatales YPF y Enarsa y a los ya detenidos Julio De Vido (exministro de Planificación) y Roberto Baratta (exsubsecretario de Control de la misma cartera), se apunta a supuestos delitos cometidos entre 2008 y 2015.
‘Se advirtió una sobrefacturación en las compras de GNL total y aproximada de 124,75 millones de dólares y una subfacturación de, aproximadamente, 194,28 millones. Para que la maniobra pudiera configurarse y sostenerse en el tiempo, los aportes de cada uno de los funcionarios imputados, desde sus respectivas áreas de responsabilidad, fueron indispensables‘, sostiene el juez.