La candidata a senadora nacional por la provincia de Buenos Aires de Unidad Ciudadana, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró ayer en la tarde que ‘ganamos en agosto y podemos ganar en octubre, pero sin exitismo‘.
En un acto realizado en la ciudad bonaerense de La Plata, la expresidenta convocó a ‘todos los argentinos‘ a realizar ‘una campaña ciudadana‘ de cara a las elecciones legislativas de octubre.
‘Convocamos a una campaña simple pero profunda‘, instó. A su vez, enfatizó que hay que ‘ponerle un límite‘ al gobierno de Mauricio Macri. Asimismo, dijo que ‘ganamos en agosto y podemos ganar en octubre pero sin exitismo, que es el padre de las derrotas‘.
La exmandataria encabezó el acto de relanzamiento de su campaña en el microestadio Atenas de La Plata, con vistas a las elecciones legislativas de octubre. El acto ofició de celebración del triunfo, luego de conocerse recientemente el escrutinio definitivo que reveló que Cristina logró una victoria en las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) de agosto pasado, con una diferencia de 0,21 puntos porcentuales respecto al candidato de Cambiemos, Esteban Bullrich.
En las primarias de agosto hubo ‘manipulación, no solamente en la información. Descubrimos falsificaciones en telegramas, presidentes designados a dedo simpatizantes del gobierno‘, remarcó ante centenares de simpatizantes en La Plata.
¿Y Susana?
Por Twitter, la conductora televisiva Susana Giménez advirtió que no entrevistará a la candidata a senadora Cristina Fernández, al apuntar que concretar ese reportaje sería como ‘traicionar‘ sus ‘principios‘ y sus ‘ideas‘.
‘Queremos poder acceder a una auditoría del software en el cual ingresan los datos, porque ahora después de ver todo lo que pasó (en las primarias) me doy cuenta por qué con tanto ahínco (el Gobierno) quería (aprobar) el voto electrónico‘, remarcó.
Destacó que es ‘la primera vez en la historia electoral nacional‘ que un acta de escrutinio definitivo da como ganador al que había aparecido perdedor en el provisional. ‘Los argentinos hoy sentimos que nos quisieron vender gato por liebre. Pero no fue gato, fue liebre‘, subrayó, para criticar que tras la jornada electoral desde el macrismo primero dijeron que ganaron y después que había ‘empate técnico‘. ‘Las elecciones no se empatan, se pierden aunque sea por un voto‘, añadió.
Tras mostrar la foto de Santiago Maldonado se refirió a su desaparición como ‘lo más grave‘ que sucedió en el país desde la asunción de Macri y agregó: ‘la Gendarmería que tenemos hoy es la misma Gendarmería que estaba hasta el 2015. Lo que cambió es los que dan las órdenes‘, sostuvo y sentenció: ‘y los militares reciben órdenes‘.
‘Ganó Unidad Ciudadana y perdió el Gobierno‘, dijo y subrayó: ‘De cada tres argentinos, dos votaron la oposición al ajuste‘. Cristina reunió a los candidatos y dirigentes del espacio en el Club Atenas, donde modificó la estética de su campaña para las PASO: ya no hubo escenario en 360 grados ni tampoco ocupó en soledad el centro de la escena, sino que los postulantes la acompañaron en el escenario. Ocuparon el escenario los intendentes bonaerenses K, los candidatos a diputados nacionales y el segundo candidato a senador, Jorge Taiana, entre otros. Agencias
Exgobernador fue procesado
El juez Claudio Bonadio procesó ayer al exgobernador de Santa Cruz Carlos Sancho como supuesto miembro de una asociación ilícita que habría encabezado la expresidenta para el lavado de activos en la causa ‘Los Sauces‘.
Así lo indicaron fuentes judiciales, que precisaron que Bonadio dispuso embargar al exmandatario por 10 millones pesos.
‘El aporte de Sancho es el haber creado empresas a fin de canalizar los alquileres espurios hacia Los Sauces SA. y gerenciar con una de sus empresas un hotel perteneciente a la sociedad de la familia Kirchner‘, sostuvo el juez en el fallo. Bonadio afirmó que ‘sus empresas fueron creadas en momentos en que Néstor Kirchner y Cristina Fernández (de Kirchner) ocupaban los más altos cargos del Poder Ejecutivo‘ y todas tienen relación con ‘Los Sauces‘, la firma a través de la cual -se sospecha- la familia cobraba ‘retornos‘ de las obras públicas y concesiones petroleras entregadas a empresarios amigos.