La jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, confirmó anoche que se recuperaron restos pertenecientes a los tres ocupantes de la aeronave Mitsubishi MU-2 Matrícula LV-MCV, que cayó en la confluencia de los ríos Paraná Guazú y Barca Grande, mientras que peritos forenses continuaron trabajando en el lugar donde cayó el avión.
Los restos recuperados fueron trasladados al Departamento de Medicina Forense de San Isidro donde están siendo analizados y se sigue preferenciando la labor de los forenses, dijo a su vez la presidenta de la Junta de Investigaciones de Accidentes de Aviación Civil, Ana Pamela Suárez, junto a la titular del juzgado federal número 2 de San Isidro.
La doctora Arroyo Salgado agregó que se está ‘priorizando la recuperación de las tres personas que se verificó que viajaban en el avión, dándole intervención a las familias para que puedan controlar y formar parte de todo este proceso‘.
La titular del juzgado afirmó además que se convocó a un tanatólogo que ‘deberá analizar los restos humanos que se están encontrando‘. Arroyo Salgado indicó, también, que dadas las condiciones del terreno y el trabajo de campo ‘el juzgado decidió convocar al Equipo Argentino de Antropología Forense, que envió ayer a dos expertos que hicieron un trabajo directo en la recuperación‘.
La magistrada pidió prudencia y respeto por los familiares ‘que están sufriendo la pérdida de las tres personas‘. Ana Suárez señaló que la estructura del avión sólo va a ser retirada una vez que el trabajo de los forense haya concluido, ‘aunque hay algunos restos que ya fueron derivados a la Prefectura‘.
Según pudo confirmar el portal periodístico Infobae, a raíz de los operativos llevados a cabo en el lugar donde hallaron el avión que cayó en el Delta ya se encontraron dos cuerpos, aunque aún no fueron identificados.
Fuente: Télam