El gobernador jujeño Gerardo Morales fue consagrado ayer por unanimidad como nuevo presidente del Comité Nacional de la Unión Cívica Radical (UCR), en una reunión plenaria desarrollada en la histórica sede partidaria de la Ciudad de Buenos Aires.
El acuerdo para que Morales reemplace a Alfredo Cornejo al frente del radicalismo fue resultado de una negociación para la unidad encarada por Morales y el senador nacional Martín Lousteau, quien representa al sector interno UCR-Evolución, minoritario en el partido y que aspiraba también a ocupar el máximo cargo partidario.
Morales es el nuevo presidente de la UCR y también retendrá la vicepresidencia primera del partido que estará en manos de María Luisa Storani, mientras que en la vicepresidencia segunda será ocupada por Martín Lousteau.
Cornejo abrió la sesión para dar un balance de gestión sobre los dos últimos años que estuvo frente del Comité Nacional. En su discurso, destacó la "muy buena performance" que la UCR tuvo en las legislativas de noviembre, que -dijo- le otorgó al partido una postura de "mayor equilibrio" frente a sus aliados del PRO en Juntos por el Cambio (JxC).
"Tuvimos una performance exitosa en casi todas las provincias, donde mejoramos nuestra representación territorial y legislativa respecto al 2019", remarcó. En particular, se refirió a los resultados obtenidos en la provincia de Buenos Aires.
"Para ser un partido nacional teníamos que tener mayor peso en la provincia de Buenos Aires y lo hemos logrado con una estrategia encabezada por Facundo Manes en esa primaria, pero fue una estrategia conjunta de todo el partido", subrayó.
Cornejo abundó que la pasada elección "revitalizó" a la UCR y subrayó que el partido logró así "contribuir a un equilibrio de poder" en el Congreso que, sostuvo, "se vio claramente reflejado en la votación (de ayer) en la Cámara de Diputados", donde fue rechazado el proyecto de Presupuesto 2022.
En otro tramo de su discurso, Cornejo aprovechó para recordarle al PRO la poca gravitación que tuvo su partido durante los cuatros años de la administración de Mauricio Macri y dejó en claro que buscarán disputarle la hegemonía de JxC al PRO de cara al 2023.
"En estos dos años nos tocó volver a la oposición y nos tocó en los anteriores ser oficialismo en un gobierno en el que no tuvimos una participación plena", dijo y agregó: "En estos dos años que estuvimos en la oposición el radicalismo logró equilibrar la ecuación de poder dentro de JxC". Unos 94 delegados eligieron por unanimidad a Morales para los dos próximos años. Ambos dirigentes conversaron sobre la posibilidad de una futura reunificación del bloque en Diputados, fracturado con la decisión de Lousteau de no compartir la bancada que preside Mario Negri.