En medio de algunos actos de violencia que trajeron a la memoria las imágenes de los saqueos que pusieron a la ciudad en la tapa de todos los diarios en diciembre de 2012, Bariloche eligió ayer como nuevo intendente a Gustavo Gennuso y dejó sin reelección a la candidata del Frente para la Victoria, María Eugenia Martiri.
La candidata kirchnerista buscaba su reelección al frente de la municipalidad de San Carlos de Bariloche después de que en 2013 reemplazara al frente del Ejecutivo municipal al ex intendente (depuesto por Referéndum Popular) Omar Goye.
El científico y dirigente social Gustavo Gennuso, del partido Juntos Somos Bariloche, llegó a la competencia con el aval del gobernador Alberto Weretilneck, hombre del PJ pero distanciado con el Gobierno nacional. El mandatario provincial consiguió el 15 de junio pasado su reelección con un triunfo sobre el senador K, Miguel Angel Pichetto.
Aunque hasta pasadas los 22 la Junta Electoral de Río Negro no difundía resultados oficiales, Gustavo Gennuso se habría impuesto en las elecciones municipales por amplio margen y asumirá la Intendencia en diciembre por los próximos cuatro años.
Gennuso salió minutos después de la 21 a proclamarse vencedor “por amplio margen”, por los resultados que contaban sus fiscales. Pero poco después fue la propia Martiri quien reconoció la victoria de su contrincante a quien felicitó través de los medios de prensa. Al mismo tiempo expresó un emocionado agradecimiento a sus colaboradores y figuras del peronismo que la acompañaron desde que asumió el cargo.
“No nos unimos para ganar una elección sino para cambiar la historia de Bariloche, y eso es lo que vamos a hacer”, expresó Gennuso en el búnker de la calle Onelli, junto al gobernador Weretilneck y numerosos funcionarios y colaboradores partidarios, al adjudicarse el triunfo por un “amplio margen con cerca del 50% de los votos”.
Estas elecciones se desarrollaron a la sombra de incidentes perpetrados por un grupo de jóvenes en una escuela y el robo a un local partidario del Frente Grande, que adhiere a la postura política de Weretilneck.
Pese a la incertidumbre que generó la detención de quince jóvenes por destrozar a piedrazos los ventanales de la escuela 315 minutos antes del inicio de la votación, la intendente Martini minimizó la situación al señalar que se trató de “hechos policiales”.
De acuerdo a lo reportado por la Policía, un grupo de jóvenes, en su mayoría menores de edad, arrojó piedras alrededor de las 7.30 contra la escuela ubicada en inmediaciones del barrio El Alto por lo que intervino el Cuerpo de Operaciones Especiales que incluso usó balas de goma para reprimir a los violentos.

