Desde Cambiemos abrieron conversaciones para alcanzar un pacto de gobernabilidad con legisladores del peronismo federal, mientras se espera que la desventaja numérica que tendrá la alianza de Mauricio Macri en el Congreso se resuelva buscando acuerdos con gobernadores.
El diputado macrista Federico Pinedo afirmó ayer que la desventaja numérica que Cambiemos tendrá en el Congreso Nacional la resolverá con ‘acuerdos de más largo plazo‘ con los gobernadores en ‘los temas que son importantes‘ como los vinculados a la pobreza, infraestructura, calidad educativa y lucha contra el narcotráfico.
‘Vamos a vivir momentos difíciles al principio pero con mucha potencialidad para adelante‘, vaticinó el jefe del bloque de Diputados de PRO, el partido que fundó el presidente electo Mauricio Macri. Pinedo, quien a partir del 10 de diciembre pasará a ocupar en el Senado la banca que dejará vacante Diego Santilli para asumir como vicejefe de gobierno porteño, confió que la deficiencia numérica de Cambiemos en el Congreso, especialmente en la Cámara Alta, se compensará con acuerdos con los gobernadores. En declaraciones radiales, dijo que espera consensos que van a permitir a la Argentina ‘funcionar como un avión‘.
Para alcanzar consensos en un Congreso que será adverso al futuro Poder Ejecutivo, el frente Cambiemos dijo que ‘se abrieron conversaciones para un acuerdo interparlamentario con peronistas no kirchneristas‘, especialmente en el Senado, en donde el PRO y el radicalismo sumarán una quincena de legisladores, en clara minoría con respecto al Frente para la Victoria. Eso fue lo que expresaron a la agencia de noticias Télam altas fuentes de Cambiemos, el frente que integran el PRO, el radicalismo y la Coalición Cívica.
‘Posiblemente habrá un interbloque del peronismo federal más grande que el actual, presidido por Adolfo Rodríguez Saá o Juan Carlos Romero, y ya hay borradores para poder suscribir acuerdos de gobernabilidad‘, explicaron a Télam desde Cambiemos.
Esta semana, la vicepresidenta electa, Gabriela Michetti -que presidirá el Senado- sostuvo que están ‘muy convencidos que los proyectos que se van a presentar sean aprobados porque no son de la política, serán en el interés de la gente‘. ‘Vamos a trabajar en tandem con (el diputado electo) Emilio Monzó y con el Ministerio del Interior (en alusión a Rogelio Frigerio)‘, afirmó Michetti, visibilizando el grupo que designó Macri para lograr consensos en el Parlamento y con los gobernadores del Partido Justicialista (PJ).
De hecho, desde el entorno de Frigerio dejaron trascender que lo ocurrido el jueves en la Cámara baja -la ausencia de diputados del massismo y de peronistas riojanos- fue resultado del trabajo ‘en coordinación‘ que comenzaron a hacer.
El gobierno entrante busca alcanzar acuerdos en ambas cámaras y para eso trabajará el Ministerio del Interior articuladamente con Michetti y Monzó, acentuando el diálogo con gobernadores y conteniendo la relación con radicales.
Frigerio estará a cargo de una cartera reforzada con ese propósito: Cambiemos informó que buena parte del sector de obras públicas del Ministerio de Planificación (que será disuelto) será absorbido por Interior, en lo que se descuenta que será una carta constante que esgrimirá el Ejecutivo para lograr apoyo de provincias.
Con este esquema, Macri se decantó por poner al frente de la negociación política con el radicalismo y el peronismo a su ex jefe de campaña y armado nacional, Monzó, y a uno de los que enhebraron el acuerdo con los radicales, como Frigerio, además de Michetti (principal puente inicial de Macri con los cofundadores de Cambiemos, Elisa Carrió y Ernesto Sanz). DyN y Télam

